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“Hay robos a punta de navaja en las calles del polígono
desde las 7.00 hasta las 19.00 horas”, sentenció el portavoz
de los empresarios del Tarajal, Mohamed Ahmed. La comunidad
de propietarios ha dado la voz de alarma ante la oleada de
delincuencia que sufre la instalación. No hay día en que no
haya robos, coacciones o navajazos, aseguran.
La presencia de efectivos de la Policía Nacional regulando
el paso a través del Biutz y la patrulla de la Local que
controla el tráfico en los aledaños del polígono no son lo
suficientemente disuasorios. “Estos robos se producen en las
calles donde no hay policía”, confirmó Ahmed.
Hasta ahora los porteadores son el principal objetivo de los
robos a punta de navaja. Si no tienen dinero encima les
quitan el bulto.
La venta ambulante ha crecido también en las calles del
polígono. La picaresca ayuda a la supervivencia de estos
grupos que, al sentir la presencia policial huyen corriendo.
Los comerciantes denuncian la competencia desleal y se
quejan de que ocupan las aceras de las calles con sus
puestos.
Regularización
El portavoz del polígono se quejó de que las nuevas medidas
dirigidas a relanzar la regularización de las naves no estén
dando sus frutos. “Nos dijeron que en septiembre se iban a
ver los resultados. Aún no hemos visto a ningún comerciante
que se le haya concedido el permiso de apertura para su
nave”, lamentó Ahmed.
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