Todos los años, con la llegada del verano, los centros de
menores de la Ciudad Autónoma se colapsan por la afluencia
masiva de niños y jóvenes extranjeros convertidos en
inmigrantes precoces. Sin embargo, esa constante se ha visto
alterada este verano, periodo en el que los centros de
menores de nuestra ciudad acogen la cifra más baja de
menores extranjeros no acompañados de los últimos años.
Según explicó la consejera de Bienestar Social, María
Antonia Garbín, el centro de menores de La Purísima, donde
la Ciudad Autónoma acoge y tutela a pequeños extranjeros que
pasan clandestinamente la frontera con Marruecos, alberga
actualmente a 125 menores. “Hace mucho que no vivíamos una
situación así, casi ni me acuerdo”, comentó Garbín
reconociendo su “alegría” por este “importante descenso” que
han vivido los centros de menores tras el alarmante repunte
del pasado mes de enero. Entonces, La Purísima se colapsó
con 205 menores bajo su techo, una cifra que no tiene nada
que ver con los 125 que hay ahora.
Para Garbín, este hecho evidencia que “las cosas están
mejorando al otro lado de la frontera”.
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