El debate sobre si la Justicia trata con más benevolencia a
las mujeres que a los hombres, incurriendo a su vez en una
falta de trato equitativo, por el drama que padecen a causa
de la tragedia del maltrato ha vuelto esta semana a la
Jefatura Superior del Cuerpo Nacional de Policía en forma de
denuncia de un hombre a su ex mujer.
Jorge [nombre ficticio que corresponde a las iniciales E. G.
R.] volvió a llevar a su ex mujer, Margarita [P. A. V.],
como denunciada a la Jefatura Superior del Cuerpo Nacional
de Policía de Ceuta anteayer después de vivir un nuevo
episodio de “incumplimiento”, según su versión, del convenio
que regula el tiempo que debe pasar su hija con él.
Según el texto de la denuncia, en poder de este periódico,
Jorge debía recoger a su vástaga el viernes para estar con
ella hasta las 20.00 horas del domingo. Media hora antes del
momento estipulado para recogerla llamó a su ex mujer y esta
le dijo que estaba en el hospital con la niña haciéndole
pruebas.
El padre fue al hospital y allí se encontró con ambas. Se
entrevistó también con el médico asistente para conocer el
tratamiento que debía suministrarle, pero cuando reclamó a
su ex pareja las recetas y demás indicaciones facultativas
esta se negó a dárselos, igual que a entregarle a la niña.
“Viendo la actitud violencia de su ex-mujer tuvo que soltar
a su hija para evitar que tirase de ella”, dice el relato
policial de lo sucedido en el hospital, donde trabaja la
madre, a la que tampoco pudo localizar el cuerpo de
vigilantes de seguridad del clínico.
Separado y en proceso de divorcio, Jorge aseguró ayer haber
sido víctima durante los últimos años de “infinidad de
injusticias a causa de una legislación que da la razón a las
mujeres en cualquier conflicto por el único hecho de serlo”.
“Soy consciente del drama de la violencia doméstica, que
obviamente es real, pero que no justifica el que padres que
cumplen con su responsabilidad no puedan hacer valer sus
derechos”, lamentó.
|