La Dirección Provincial del Ministerio de Educación,
Política Social y Deporte (MEPSYD) confía en que de aquí al
próximo lunes los responsables del colegio privado
concertado San Daniel y la familia de la niña musulmana de
13 años que este verano decidió ponerse el hiyab y que no
fue admitida por ello en las aulas lleguen a un acuerdo que
permita a la joven volver a clase, según apuntó ayer
Aquilino Melgar. Hasta entonces no se planteará ninguna otra
intervención.
Los cooperativistas del colegio San Daniel celebraron
después del mediodía de ayer una reunión a puerta cerrada
con cuyas conclusiones, que prefirieron no dar a conocer
[fuentes cercanas al mismo dieron por seguro que reforzó su
negativa inicial], sumadas a las que se extraigan del
Consejo Escolar que se celebrará el próximo lunes, decidirán
si mantienen o no su negativa a aceptar en sus aulas a una
joven estudiante de 13 años de confesión musulmana que este
verano decidió ponerse el hiyab.
Pese a que el centro escolar mantiene su negativa a
facilitar información oficial sobre el asunto según las
fuentes consultadas la Dirección es partidaria de no
modificar los criterios estipulados en su Reglamento,
mientras que otros miembros del colegio, minoritarios,
serían partidarios de explorar la posibilidad de buscar
encaje en dicha normativa al pañuelo islámico siguiendo la
línea del Beatriz de Silva.
Según apuntó ayer el director provincial del MEPSYD en
Ceuta, Aquilino Melgar, en declaraciones a este periódico,
la institución confía en que de aquí al próximo lunes ambas
partes alcancen un acuerdo satisfactorio para ambas partes.
“Esa sería la mejor solución posible y hasta entonces no nos
plantearemos ninguna otra intervención”, señaló Melgar,
quien valoró positivamente la actitud tanto de los padres
como del colegio en su voluntad de mantener el asunto dentro
de los cauces de la vida interna del centro y abogó por
mantener el tema así.
La Dirección Provincial ha encargado a su equipo técnico un
informe sobre el caso que no se cerrará hasta el lunes.
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