El viceconsejero de Recursos Humanos de la Ciudad Autónoma
de Ceuta, Javier Díez Nieto, aseguró ayer que su objetivo
prioritario es “dar solidez al empleo” en la Administración
ceutí “para que los servicios que presta estén perfectamente
atendidos y mejorar así la atención a las demandas de los
ciudadanos”.
Tras recibir el informe del Ministerio de Administraciones
Públicas, cosa que sucedió a finales del pasado mes de
julio, y después de las diferentes reacciones que en prensa
se han sucedido, el viceconsejero de Recursos Humanos de la
Ciudad Autónoma, Javier Angel Díez Nieto considera que lo
“importante es gestionar y trabajar para dar solidez al
empleo y que los servicios de la Ciudad esté perfectamente
atendidos, con lo que redundará en una mayor y mejor
atención a las demandas de los ciudadanos”.
Y así lo afirma cuando el MAP, a instancias del propio Díez
Nieto, ha considerado y dado la razón al ejecutivo local en
su informe que explicita el dato de que “no se considera
adecuada la utilización de las bolsas de trabajo como forma
habitual de selección del personal temporal”, situación ésta
llevada a cabo por el gobierno autónomo el pasado mes de
marzo cuando eliminó –no sin las crudas críticas sindicales-
la, hasta entonces, inamovible bolsa de trabajo creada que
se iba, sistemáticamente, renovando desde 2000.
Esa bolsa, “obsoleta –calificó el viceconsejero-, iba camino
de provocar un claro efecto de fraude laboral por su
mantenimiento en el tiempo”. De este modo, señaló Díez
Nieto, “se planteaba el escenario deseado por el Ejecutivo”
al objeto de “acabar con la temporalidad y comenzar a crear
empleo estable”, lo que significó el ‘leiv motiv’ del grupo
de trabajo encargado de analizar la demanda real de las
necesidades de la Ciudad Autónoma a la hora de cumplir con
su deber de prestar servicio al ciudadano.
Antecedentes
El pasado 4 de julio, por hacer cronología, el Gobierno de
la Ciudad y los sindicatos firmaron un documento que
establecía los modos en que tendrían que, necesariamente,
realizarse las nuevas contrataciones en función de las
necesidades de servicio. Quedaron de acuerdo [administración
y representantes sindicales] en que las llamadas
‘contrataciones de urgencia’ se realizaran a través de
ofertas genéricas al INEM, previo acuerdo con los
sindicatos; y que a partir de 2009 se hará una preselección
para contrataciones temporales. De tal modo que se
“realizará una oferta genérica al INEM y se pedirán 3
candidatos por puesto y se elaborará un baremo para tales
contrataciones que se desarrollaría en un acuerdo
posterior”, recordó Díez Nieto.
Curiosamente el MAP, en su tan cacareado informe, considera
que “podría recurrirse al Servicio Público de Empleo Estatal
[esto es INEM], unicamente como medio de llevar a cabo la
preselección de los posibles candidatos”, que es justo lo
que se firmó con las centrales sindicales el pasado mes de
julio. Pero donde dije digo, ahora digo diego, los
representantes sindicales firmantes de aquel acuerdo, Juan
Carlos Pérez Ortega (UGT), Pedro Rodríguez Arnau (CCOO) y
Antonio Noguera López (CSI CSIF) y, en concreto, los dos
primeros, dan marcha atrás y critican las formas de la
Ciudad a la hora de solicitar al INEM el personal para
seleccionar.
Aún así, la Ley marca claramente las formas y debe
diferenciarse aquellos contratos temporales que han de
cubrirse por necesidades de servicio con los que se acceden
eventualmente a la administración, del ingreso como personal
en la función pública que sólo puede realizarse por sistema
de oposición, concurso-oposición, o el concurso de
valoración de méritos “en cuyo caso, y desde luego no se
recurre a la preselección del INEM por tratarse de Ofertas
Públicas de Empleo”, aclaró el viceconsejero.
Pese a este ambiente, supuestamente hostil, “las relaciones
entre la Administración y los sindicatos es realmente
fluida”, aseguró Díez Nieto “porque las centrales sindicales
conocen de igual modo, por su responsabilidad, la labor de
servicio público que aporta la Administración” y además “son
conscientes y su colaboración les honra”, aseguró, “de la
complicada coyuntura económica que atraviesa el país y las
instituciones”.
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