Para la tarde de ayer se esperaba la conferencia del
profesor y erudito en el Islam, Mohamed Rouahi, sobre los
Derechos de la Mujer en el Islam y la ablación femenina. El
conferenciante no pudo asistir a la cita ante la defunción
de un familiar y en su lugar actuó el ponente Hassam Zubeir,
imán principal de la comunidad islámica de Ceuta, Al Bujari.
Entre las líneas temáticas principales que compusieron la
charla, se abordaron los albores de la humanidad con
respecto a la mujer, la presencia femenina en la
construcción de la sociedad islamista y los derechos de las
féminas recogidos en el Corán y la Sunna. Ante el lenguaje
árabe, actuó como traducto Abselam Hamadi.
Sobre los derechos de las mujeres en el Islam se trató,
durante la tarde de ayer, en el salón de actos del Palacio
Autonómico de Ceuta.
Estaba prevista la ponencia a cargo del profesor y erudito
en el Islam, Mohamed Rouahi, de nacionalidad marroquí, que
versaría en la mayor parte de la charla, sobre la ablación
femenina en el Islam. Aunque no pudo asistir a la sesión
ante la defunción de un familiar. De manera improvisada, la
charla, realizada con motivo de la celebración del mes del
Ramadán, estuvo a cargo de Hassam Zubeir, imán principal de
la comunidad islámica de Ceuta, Al Bujari. Hassam Zubeir ha
sido imán de varias mezquitas de la ciudad autónoma. Estudió
en la Mezquita Mayor Hassam II de Marruecos licenciándose en
Ciencias de la Religión. La intervención del imán principal
comenzó quince minutos más tarde de la hora esperada, en
torno a las siete menos cuarto de la tarde con una breve
pieza extraída del Corán y una serie de alabanzas a Dios y
el profeta. Acto seguido, dio comienzo la propia ponencia,
sobre la cual advirtió, que no introduciría el tema de la
ablación femenina por no poseer los conocimientos
suficientes y no ser un experto en dicho ámbito. Las líneas
temáticas que compusieron su exposición fueron divididas en
tres etapas: “hablaré sobre los albores de la humanidad con
respecto al nacimiento de la mujer, la presencia femenina en
la construcción de la sociedad islámica y los derechos de la
mujer en el Corán y la Sunna”, sintetizó, minutos antes de
su conferencia, Hassam Zubeir. Palabras que interpretó el
traductor Abselam Hamadi.
En la primera etapa se explicó la ignorancia existente en la
Prehistoria y la época preislamista sobre la mujer, unos
1.300 años antes de Cristo. “En aquella época a las niñas
las enterraban vivas y eran consideradas como un deshonor.
Fueron utilizadas como herramientas y esclavas y no tenían
derechos en general. Todo esto desde la época prerromana y
edad de piedra y bronce. Entrados en la era de los persas y
romanos el papel de la mujer, no cambió”, sintetizó el imán
principal de la comunidad islámica de Ceuta. Y con la
llegada del profeta Mahoma, llegó el alzamiento de la mujer
en la sociedad. “El Islam dio derecho a las mujeres como
personas, status y compañera del hombre, y el hombre de
ella. En la igualdad se equiparan al mismo nivel porque no
pueden estar el uno sin el otro. Y a nivel jurídico ambos
sexos poseen las mismas condiciones. En el Islam, la
sociedad no puede avanzar sin la incorporación de la mujer”,
añadió el ponente. En torno a las percepciones y el papel
que desempeña el género femenino, en pleno siglo XXI, el
imán sintetizó: “Desde que llegó el profeta, hombre y mujer
han sido iguales. Otra cosa es cómo interpretaron la función
de la mujer, los hombres, y no la propia religión. Las
féminas tiene derecho al trabajo, a la cultura, a la
sociedad todo equiparable a las labores que tienen los
hombres. El machismo que ha imperado en los países árabes no
tiene nada que ver con el Islam, ya que es una costumbre del
África Subsahariana, y que practicaban las tribus muy
lejanas al cristianismo, el judaísmo o el islamismo”,
concretó. Sobre las líneas jurídicas que propone el Corán y
la Sunna, explicó: “La constitución física del hombre y la
mujer son diferentes pero en el Corán, los hombrres tiene
derechos sobre las mujeres y viceversa. La mujer debe ser
compañera y amiga, y juntos deben tomar decisiones. Alá
responsabiliza tanto al hombre como a la mujer de los
mandatos divinos y si los cumplen, Dios los premiará con la
gloria”.
|