Los hechos ocurrieron en noviembre de 2007, cuando los
funcionarios de Los Rosales realizaban una inspección por
las diferentes celdas, encontrando dos piezas de hachís que
sumaban los 238 gramos. El acusado, que en un principio
afirmó que las sustancias eran suyas, ha modificado su
testimonio alegando que le pagarían si asumía dicha
posesión.
El fiscal del Juzgado de lo Penal número 2 de Ceuta solicitó
ayer una pena de cuatro años de prisión para el acusado M.
A. por un delito contra la salud pública en el interior de
la prisión Los Rosales.
El acusado, que se encontraba encarcelado por otros delitos,
modificó su testimonio durante el juicio alegando que le
habían prometido una cantidad monetaria si asumía la
posesión de las sustancias estupefacientes encontradas en la
celda durante la inspección de los funcionarios de
prisiones.
Los antecedentes del caso se remontan al 10 de noviembre de
2007, cuando los trabajadores de la cárcel Los Rosales,
durante una inspección rutinaria, encontraron dos piezas de
hachís que suman la cantidad de 238 gramos en la celda
número siete.
A priori el acusado, que responde a las iniciales M.A.,
asume la posesión de las sustancias estupefacientes. Sin
embargo, rectificó su declaración en el juicio celebrado
ayer, alegando que “el hachís no era suyo pero que asumió la
responsabilidad porque le pagarían una cierta cantidad de
dinero a cambio”. Por ello el acusado no mostró conformidad.
Otro de los datos curiosos del caso fue la declaración
prestada por uno de los funcionarios de prisiones que actuó
como testigo durante la sesión. En su testimonio explicó que
en estos casos “nadie asume la pertenencia de la droga pero
entre los compañeros de la celda hablan entre ellos o llegan
a un acuerdo para ver quién carga la culpa”.
El juicio quedó pendiente para sentencia.
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