El año 2004 fue el de peor registro de incendios del último
lustro. La temporada de verano está a punto de concluir, el
cielo está más nublado estos días y se nota que otoño se
aproxima, aunque el dispositivo en el monte no se modificará
hasta el 1 de noviembre, día de la mochila en la ciudad.
En 2004 fue preciso requerir la presencia de aviones contra
incendios, debido a la cantidad de héctareas que el fuego
devoró. Éste fue el peor registro de los últimos cinco años,
con 10 incendios localizados en los montes de la ciudad y
con una superficie afectada de 252.000 metros cuadrados,
algo más de 25 hectáreas (una hectarea equivale a un campo
de fútbol aproximadamente).
En 2005 sólo se produjo un incendio, de una hectárea y media
de superficie, mientras que en 2006 se alcanzó la segunda
cifra más alta: dos incendios localizados provocaron la
quema de 51.000 metros cuadrados, cinco hectáreas. En 2007
se consiguió, por contra, el mejor dato, con 0 incendios
detectados y con 0 metros cuadrados de superficie afectada.
Este año ha regresado el fuego a la ciudad. Ha sido un único
incendio el que se ha detectado, hace menos de dos semanas,
en San Antonio, y afectó a 2,5 hectáreas.
Los incendios registrados no responden a conatos de incendio
y se contabilizan a partir de una hectárea. Las lluvias de
otoño devolverán la calma.
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