PortadaCorreoForoChatMultimediaServiciosBuscarCeuta



PORTADA DE HOY

Actualidad
Política
Sucesos
Economia
Sociedad
Cultura

Opinión
Archivo
Especiales  

 

 

cultura - JUEVES, 28 DE AGOSTO DE 2008


actividades del campamento. a samiñán.

reportaje / campamento de verano de miguel de luque
 

Educando desde la risa y el pringue

La Consejería de la Juventud y la empresa Acudeduca organizan hasta el viernes un campamento de verano juvenil con multitud de actividades dirigidas a fomentar la convivencia en grupo de los niños
 

CEUTA
Fernando M. Caracena

ceuta
@elpueblodeceuta.com

Acudeduca tiene una particular forma de organizar sus actividades dirigidas a los niños. La empresa, formada por licenciados en magisterio, sabe jugar con el equilibrio de la risa y la didáctica.

Ahora son los encargados de realizr las actividades del campamento de verano para niños de 10 a 14 años que estos días está teniendo lugar en Miguel De Luque. Nada más llegar al complejo rural se escuchan las risas de los niños al fondo. Uno de los monitores, Antonio Muñoz, ataviado con un altavoz y bastante guasa, lanza agua con una manguera a una masa de niños compacta y expectante. Todos sostienen un pequeño vaso con el que van rellenando un par de botellas de agua aguantados por dos monitores. Hay dos grupos, el A y el B, quien rellene más, gana. Cuando termina la prueba, los del grupo B estallan como si hubieran ganado el Memorial Alfonso XIII. Los del A piden revisión y apelan al árbitro.

A la entrada de las habitaciones donde duermen los 43 niños del campamento hay un panel de libre expresión y un buzón del amor. El panel, poco utilizado, lleva sentencias del tipo El panel de libre expresión mola mogollón. El campamento de las cabañas está en las montañas. Todo muy dadá. El buzón del amor sí que rebosa de papelitos dejados por los chicos. Por las noches, después de la dinámica de grupo que siempre realizan, leen los mensajes. Desgraciadamente en el buzón del amor hay poco amor. A fulanito le huelen los pies o No sé quién hace mucho ruido por las noches son el común de los mensajes. Junto al panel de libre expresión, hay otro donde en enormes letras pone Cementerio con letras ensagrentadas, es un juego de vampiros. Uno de los niños es el vampiro y debe ir mordiendo al resto sin que le vea nadie. Dibujadas en el tablero hay multitud de lápidas y los niños atacados por el vampiro deben informar sobre su expiración. Muerto por causas desconocidas, escribe uno. La forma de tratar un asunto como la muerte sin tener que hacerlo tabú es realmente audaz.

De vuelta en el patio los niños han formado un círculo. El juego no es competitivo, tienen que entre todos conseguir pasar la manguera por una pieza de ropa y rodear el círculo antes de que pasen siete minutos. “El objetivo es que se desinhiban y ademá romper la relación un poco tradicional entre chicos y chicas y que participen sin problemas en este tipo de juegos”. mientras explicaba la intención de la prueba Estefanía Rodríguez, el pobrecillo Rubén, que le había tocado ser la primera pieza del círculo, se afanaba por pasar el largo de la manguera por el bañador, con una intensidad conmovedora. Al final de la prueba, los monitores pidieron un aplauso por su ponderable labor.

“La idea principal de campamento es que comprendan la convivencia, que sepan lo que es estar en un grupo de forma participativa. No tenemos tanto interés en que aprendan en los talleres a hacer malabares o que afinen la puntería sino que las compartan entre ellos”. El altavoz de Antonio interrumpe a Estefanía. Ahora viene la prueba popularizada por el Grand Prix y el nunca lo suficientemente loado Ramón García: la patata caliente. En este caso fría y con agua. Los monitores hacen preguntas sencillas, muchas veces relacionadas con el entorno de la ciudad. ¿Cuántos habitantes tiene Ceuta? “735” responde uno de los niños. “

Hoy es la jornada del pringue. Por la mañana han hecho paintball, el juego que consiste en dispararse bolas de pintura, aquí adecuado a un campamento juvenil trocando las pistolas por jeringuillas. “Hemos hecho dinámicas de grupo, algunas veces tenían que estar parados y arreglárselas para que el otro grupo lo manchase lo menos posible”. Por la tarde se organiza la fiesta del agua y durante la noche tendrán una sesión de juegos con merengues y potingues. La noche atrevida la llaman. Si a alguno le parece demasiado atrevida siempre podrá ir a desahogarse en el panel de libre expresión.
 

Imprimir noticia 

Volver
 

 

Portada | Mapa del web | Redacción | Publicidad | Contacto