El Gobierno de España “mantiene un control permanente” del
perímetro fronterizo que separa Melilla de Marruecos para
evitar que se pueda producir ningún intento de entrada
irregular de inmigrantes a la ciudad autónoma.
Vigilancia
A preguntas de los periodistas, el delegado del Gobierno en
Melilla, Gregorio Escobar, subrayó ayer que las Fuerzas y
Cuerpos de Seguridad del Estado vigilan de forma
“permanente” la frontera de la ciudad, para lo que resulta
“fundamental” la colaboración de las fuerzas de seguridad
marroquíes.
Impermeabilización
Además, Escobar recordó otras medidas que ha impulsado el
Gobierno socialista para impermeabilizar la frontera de
Melilla y evitar los intentos de entrada de inmigrantes,
entre ellas la elevación de la alambrada fronteriza hasta
los seis metros y la instalación de la sirga tridimensional
entre las dos vallas.
Refuerzo de la vigilancia
Asimismo, en los últimos años se ha producido un “refuerzo”
de la Guardia Civil y la Policía Nacional para la vigilancia
de la frontera, lo que unido a la “colaboración de
Marruecos” evidencia que “seguimos trabajando para evitar
cualquier intento de entrada irregular a Melilla”, como los
dos que tuvieron lugar la semana pasada, que fueron
abortados por el país vecino.
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