Indignados, decenas de bañistas de la playa de la Almadraba
se vieron obligados ayer a conformarse con refrescar sus
cuerpos exclusivamente con las duchas existentes en el
arenal, sobre cuyo estado también descargaron su ira, debido
al vertido de contenido y consecuencias aún desconocido que
se produjo anteayer en medio de la zona de baño.
Los bañistas de la playa de la Almadraba, en su inmensa
mayoría vecinos de los alrededores, que ayer se acercaron
hasta el arenal para sofocar el intenso calor que se sufrió
durante el día de ayer en la ciudad se encontraron con la
desagradable sorpresa de que tanto los vigilantes de
barriadas encargados del área como el equipo de Cruz Roja
desplazado a la playa, que izó la bandera roja, les
conminaban a no entrar siquiera en el agua.
Según explicaron ambos a EL PUEBLO TV anteayer comenzó a
salir agua “a borbotones” de la cañería que, descubierta, se
encuentra en plena playa, por lo que tras dar cuenta del
incidente, de origen desconocido, a la Consejería de Medio
Ambiente y a los servicios de Sanidad se tomó la decisión de
prohibir el baño en la zona hasta que se conozca el
resultado de los análisis que se están realizando a las
muestras que se tomaron del vertido, conclusiones que según
fuentes oficiales se sabrán hoy.
Los ceutíes que en ese momento se encontraban en la zona
criticaron duramente el mantenimiento de la playa y
denunciaron la “dejadez” institucional de que a su juicio
son objeto en esa parte del litoral ceutí “si se compara con
cómo se gestionan las playas de La Ribera y El Chorrillo”.
“Tenemos unas duchas del siglo pasado y cada dos por tres,
cada vez que hay un corte de luz, aparecen vertidos que,
ayudados por las redes antimedusas, convierten esta playa en
un lodazal”, criticó airado un bañistas mientras, fuera de
la zona oficial de baño, una decena de niños seguían metidos
en el agua.
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