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El pasado 1 de julio de este año, casi 110 mandos destinados
en Ceuta quedaron en situación de disponibilidad forzosa
después de que se cumpliera la primera fecha de la
reestructuración. A finales de julio salieron 64 vacantes,
pero sólo 40 se van a asignar por antigüedad; el resto, se
concederán según libre designación, lo que puede implicar
“favoritismos”, desde el punto de la plataforma ‘antirreducción’.
El comandante general de Ceuta, Enrique Vidal de Loño,
luchará porque esas 24 plazas sean concedidas a personas que
han quedado en situación de disponibilidad forzosa en la
ciudad. El Boletín Oficial de Defensa arroja que de las 64
vacantes que se publicaron en los últimos días de julio y
primeros de agosto, sólo 40 se otorgarán por antigüedad,
algo que persiguen los familiares de las personas que,
debido al Plan de Reestructuración del Ejército siglo XXI,
tendrán que abandonar la ciudad de manera obligada.
El hecho de que 24 plazas sean de libre designación implica
que serán los jefes de unidades, asesorados, quienes elijan
mandos para cubrir las plazas de las unidades, lo que supone
que personas que no están afectadas por la reducción puedan
optar a la plaza, bien sea por méritos de ascenso u otras
salvedades. El comandante general se opondrá a ello y
peleará porque sean favorecidos los disponibles.
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