En el mirador de Isabel II no se puede ver absolutamente
nada. Una gruesa capa de niebla se extiende por los campos
de García Aldave e imposibilita la vigilancia de las
Brigadas Forestales. “Esto es una bendición- dice el
coordinador del cuerpo de la Consejería de Medio Ambiente,
Carmelo Navarro- a cada día que pasa el campo está más seco
y a medida que avanza el verano hay más peligro de incendio
para los campos. La niebla refresca la vegetación y así
aguantará mejor unos días más”. Puede que la niebla
humedezca las plantas pero si hoy hay un incendio no hay
forma de enterarse: “Cuando hay días como el de hoy solemos
bajar la cota de altura, nos ponemos cerca de la curva donde
está el retén de bomberos y desde allí la visibilidad es
mucho mejor y tenemos bastante campo de visión”.
Desde el inicio de la vigilancia el 1 de junio han hecho un
total de 22 avisos a los Bomberos. El funcionamiento de las
Brigadas Forestales es sencillo, si ven humo avisan
rapidamente al servicio de extinción y envían un grupo
destacado para cerciorarse de cómo progresa el fuego o de la
peligrosidad que tiene: “Hay veces que nos encontramos con,
por ejemplo, dos chavales que están quemando un colchón,
entonces avisamos a los Bomberos que es algo fácil de
controlar, si vemos que las llamas están en medio de una
masa forestal abundante les decimos que es grave y que
vengan con medios suficientes”. La mayoría de los fuegos se
producen en el cinturón periurbano de la ciudad, así es como
denominan a los barrios periféricos que limitan con los
montes. “Casi todos se producen por negligencia, en Ceuta no
hay fuegos provocados”.
¿Les pregunto por la renovación en septiembre? “Pregúntales
ya ellos verán”. Uno de los integrantes de las Brigadas
Forestales se acerca para responder, tras los últimos
regateos de la administración para renovarles y las 50
personas que entrarán a hacer las labores de prevención de
los Planes de Empleo de Delegación del Gobierno, el panorama
está nublado como ayer lo estaba el monte: “Nosotros
lucharemos por nuestra renovación, las competencias de
prevención y vigilancia de incendios está ya transferida a
la Ciudad Autónoma”. Una voz, que se pierde entre la bruma,
recuerda que desde que existen las Brigadas Forestales no ha
habido ningún incendio de gravedad en Ceuta como el que se
produjo en el año 2006.
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