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El presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro,
Jorge Campos, ha mostrado su “preocupación” por la “notable
pérdida de visitantes” procedentes del norte de Marruecos
que Ceuta ha sufrido durante el mes de julio. Este achacó
tal tendencia a la huelga de celo de la Policía Nacional que
en algunos momentos provoca colas y lentitud en el paso por
la frontera del Tarajal.
Una vez finalizado el mes de julio, para los comerciantes de
Ceuta es el momento para hacer valoraciones respecto a las
ventas y a los ingresos del sector. El presidente del Centro
Comercial Abierto, Jorge Campos, lamentó la “influencia
negativa” que para Ceuta está teniendo el trabajo a
reglamento (huelga de celo) que desde hace casi un mes lleva
a cabo en la ciudad la Policía Nacional y que tienen a su
máximo exponente al control de paso por la frontera.
Campos mostró su “preocupación” por la “notable pérdida de
visitantes procedentes del norte de Marruecos” que la ciudad
ha sufrido durante julio, mes comercial por antonomasia. El
motivo de esta tendencia son, según este, las dificultades
que se encuentran a la hora de atravesar la frontera. “Es
normal. Esto es un boca a boca y al final se nota que viene
menos gente. Incluso los propios ceutíes se plantean no
pasar a Marruecos a veces”, explicó.
El representante de las tiendas del centro recordó la
importancia que para Ceuta significan las compras que
realizan turistas marroquíes con alto poder adquisitivo.
Así, este consideró que de continuar esta situación podría
tener una repercusión “gravísima” para la economía ceutí.
El comercio es uno de los motores de Ceuta y sobre todo el
sector minorista, que representa una gran mayoría. Las
estadísticas del comercio al por menor no son nada
halagüeñas y es que, según el INE, las ventas cayeron un
7,3% en junio y el acumulado de lo que se lleva de 2008 es
de -0,8%.
La huelga de celo que desde finales de junio llevan a cabo
Policía Nacional y Guardia Civil busca la equiparación
salarial con los representantes de los cuerpos Autonómico y
Local. Según la Delegación del Gobierno el trabajo a
reglamento de los efectivos de la policía y la benemérita se
realiza sólo miércoles y jueves y su repercusión es
“mínima”.
Por otro lado, la celebración del Ramadán por parte de la
población musulmana puede ser otro factor decisivo en las
ventas del sector, según precisó Campos. “Este año el
Ramadán comienza en septiembre y el ayuno no es un estímulo
a la hora de pasear por el centro y decidirse a hacer
compras”, apuntó.
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La ropa y el calzado sobreviven a la crisis en Ceuta
Los encargados de las tiendas de
ropa y calzado hacen un balance positivo del primer mes de
rebajas en Ceuta. Este parece ser el único sector que
sobrevive a la crisis puesto que las ventas se han
mantenido, según aseguraron dependientes de marcas como
Club, Springfield o Zara. Gran parte de la culpa la tiene el
turismo marroquí, según explicó Francisco, encargado de
Club: “La crisis en Marruecos no se nota”. Mientras, desde
Springfield, Miriam relató como la tienda empezó “despacio”
a vender en el inicio de las rebajas. La crisis sí se nota
en el gremio de los joyeros. El oro se encarece al mismo
ritmo que el petróleo. “En tiempos de crisis las familias
eliminan el gasto superfluo como relojes y elementos de
bisutería”, según comentó José Antonio Benítez.
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