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Este domingo lo recordaré como uno
de los días en que he sentido la fuerza de la crisis
económica en el sentido de que me han “atracado” en un
restaurante de cierta piscina perteneciente a un centro
cultural dedicado a los caballos pero que carece de tan
nobles animales.
Estén seguros que no volveré nunca más a probar bocado en
ese restaurante aunque me inviten.
Me ha sentado tan mal la comida que hasta mi cartera ha
enflaquecido horriblemente.
Menos mal que mis amigos, los Vallejo, me han resarcido con
creces.
Bueno, no siempre voy a estar en aguas de rositas y alguna
vez tendré que sufrir algún que otro descalabro. Es ley de
vida ¿no?
Lamento tener a gente tan agorera como conciudadanos. Sobre
todo si son forofos del PP tan espantados. También aquellos
que fueron de un partido y cambiaron de chaqueta, digo de
careta.
La estupidez esa de juzgar a políticos tras cien días de
trabajo no conduce a nada. Menos aún si tratan de juzgarlos
en base a mentiras urdidas y bien pergeñadas, como una forma
de expulsar los gases molestos ocasionados por la rabia mal
contenida de no salir ganadores. Esos son los verdaderos
perdedores, aunque mantengan cara de póker… en sus retretes
estallan.
A ciertos políticos les preocupan varias cosas, como por
ejemplo el paro, y solo aciertan a hablar mal de los
gobernantes… ¿por qué no proponen soluciones en vez de
ataques?
Esa preocupación de declarar que nos llevará a una situación
de incalculable gravedad y sin proyecto de reactivación
económica alguno y cuando habla de Ceuta como ciudad ubicada
en el norte de Marruecos, ¿por qué no se atreven a decir que
Ceuta es una ciudad ubicada al sur de España?, nos hacen ver
que son gente que tiene la imposibilidad de alcanzar una
cuota de credibilidad que les lleve a su onírica meta.
También resulta increíble la manifestación de cierta
política (ahí me he liado bien, cuando hablo de política no
me refiero a la política en sí sino a la persona que es
política ¿me aclaro?) en la que afirma que una Ministra le
ha asegurado “que estaba hecho” algo sobre el Campus.
Las declaraciones unilaterales sobre asuntos de envergadura
tiene la clara tendencia de buscar desprestigio de la parte
opositora, colgándole el sambenito de mentirosa, para quedar
bien ante sus acólitos y ocultar el fracaso. Es pan de cada
hora en la clase política de la falsa oposición.
Un gobernante, sea presidente o ministro sin distinción de
sexos, solo puede tener buenas palabras con sus
interlocutores. Jamás de los jamases puede soltar promesas
que sabe perfectamente que pueden perjudicar su
credibilidad. Otra cosa es que el interlocutor o
interlocutora interprete las palabras del gobernante como
promesas concretas.
Hasta el tonto del pueblo sabe que los acuerdos, posibles
acuerdos, se concretan en documentos o en leyes y/o
decretos… no creo, francamente, que exista un acuerdo sobre
el papel acerca del Campus de Ceuta. Sólo son palabras
mantenidas en conversaciones informales. Todo lo que tenga
carácter oficial se basa en documentos o en concreciones del
Parlamento. Lo demás son ganas de chingar la chinga.
Nuestros políticos, los de aquí, los de Ceuta, creen que con
ir a Madrid y pedir pan y patatas, así a lo llano, se las
van a dar. No pueden darles lo que pidan si no están
concretadas esas peticiones en acuerdos oficiales y
refrendados por el Parlamento si no existen leyes o decretos
que concedan esa clase de peticiones.
La Secretaría de Estado de Universidades sólo se guía a
través de documentos emitidos por la autoridad competente en
la materia, no puede sacarse una carta de la manga. La
autoridad competente en la materia se guía por los acuerdos
refrendados en el consejo de Ministros. El Consejo de
Ministros acata los acuerdos contenidos en leyes y decretos…
no sigo porque yo mismo me estoy mareando.
Es lamentable que nos representen quienes ignoran los
mecanismos estatales de funcionamiento de los distintos
ministerios y tuerzan las verdades hasta convertirlas en
mentiras, a su conveniencia, por claros intereses.
Si la Ministra hubiera aceptado conceder lo que la señora
política ceutí afirma, ahora sería acusada, por la misma
señora política ceutí, de amiguismo y nepotismo… ¡lo que son
las cosas!
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
