Uno de los nombres que se barajan en la dirección deportiva
de la AD Ceuta para reforzar el ataque del conjunto caballa
es el del delantero serbio Goran Maric, quien la temporada
pasada militó en el filial del Real Club Celta de Vigo,
donde se erigió en principal protagonista al materializar la
friolera de 21 dianas. Una formidable marca que
inexplicablemente no le sirvió para convencer a los técnicos
del conjunto gallego, hasta el punto de darle vía libre para
negociar su marcha, una vez descartada su continuidad el año
que le resta de contrato. Aún así, desde el conjunto vigués,
se reservarán una opción para recuperarlo cuando concluya el
curso 2007/08 como condición ´sine qua non´ para permitirle
salir gratis.
A pesar de las aparentes facilidades, la operación para que
el jugador recale en tierras ceutíes no será ni mucho menos
fácil, ya que el ariete balcánico ha despertado el interés
de clubes de superior categoría como Rayo Vallecano, Elche y
Alavés. Opciones las de madrileños e ilicitanos que con el
tiempo se han ido difuminando, quedando en la carrera la
entidad vasca.
Celta B y Las Palmas
Nacido en Novi Sad (Serbia) el 23 de marzo de 1984, Goran
Maric llegó a España para reforzar al primer equipo vigués,
pero no fue capaz de dar el salto, teniéndose que conformar
con jugar en el filial celeste. Así hasta que la campaña
2006/07 fuera cedido a la UD Las Palmas para disputar 379
minutos en Segunda División ´A´, donde no pudo estrenar su
casillero goleador. Una espina que se sacó el curso pasado,
cuando materializó hasta 21 dianas en su regreso al grupo I
de Segunda ´B´ con el Celta B.
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El delantero serbio fue pichichi del grupo I la temporada
pasada
Sus veintiún goles con el filial
no fueron suficientes para convencer a la dirección
deportiva del Celta de Vigo para seguir contando con sus
servicios. Y es que en la pasada campaña, Goran Maric se
convirtió en la auténtica referencia del Celta B, hasta el
punto de proclamarse pichichi de la categoría, junto al
delantero del Real Madrid Castilla, José Callejón. Sin
embargo, sus guarismos no sirvieron para ganarse una
oportunidad en el primer equipo, ya que ninguno de los
diferentes técnicos que pasaron por el vestuario celeste
apostaron por el serbio en sus alineaciones, disputando
únicamente 30 minutos en la Segunda División ´A´. Ahora el
Celta, que ya lo había cedido a Las Palmas la pasada
campaña, le abre definitivamente la puerta de salida
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