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Aún cuando no es todavía oficial,
en breves fechas la naviera ‘Ferries Rápidos del Sur’ que
opera habitualmente y con regularidad desde los últimos ocho
años en el Estrecho de Gibraltar uniendo los puertos de
Tarifa, Algeciras y Gibraltar con Tánger va a dar a conocer
su firme intención de incorporarse a la línea marítima entre
Ceuta y Algeciras tal y como hoy desvela nuestro diario en
las páginas 2 y 3.
Será, de este modo, la tercera naviera en competencia en la
ruta marítima entre Ceuta y Algeciras después de las
operaciones de concentración llevadas a cabo por Acciona con
Trasmediterranea y por Baleària con Buquebús.
¿Es saludable la competencia?. Sin duda. El Consejo
Económico y Social saludaría la iniciativa aunque matizaría
especialmente en las ofertas que como empresa privada
debería realizar para fidelizar clientela.
En cualquier caso, siempre es bienvenida la inversión de
cualquier empresa que fije sus objetivos, o parte de ellos,
en Ceuta. Se trata de aunar esfuerzos y aprovechar las
sinergias que provoca el empuje inversor desde cualquier
sector productivo.
En este mes de julio, en la segunda quincena para ser más
exactos, se producirá la entrada del primer catamarán de la
naviera germano española que ha crecido en el Estrecho
optando por un mercado paralelo a la tradicional ruta
Ceuta-Algeciras-Ceuta. La compañía FRS ya opera con
regularidad en los puertos de Tarifa, Algeciras, Gibraltar y
Tánger. Faltaba por conquistar el de Ceuta y ya lo han
decidido con firmeza, se incorporan en breve.
La potencialidad de Ceuta es un hecho. El horizonte en esta
concreta geozona convierte a la ciudad en un punto clave;
aún más, idóneo, para ver en ella un futuro prometedor en sí
misma como ciudad política y administrativamente europea
como lo es, rodeada de un espacio georáfico en clara
expansión económica en el que la ciudad aporte los servicios
acordes a la nueva realidad que se avecina.
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OPINIÓN / EDITORIAL
