Parece que ésta vez, sí; justo
ahora, con las relaciones tensadas, Marruecos podría estar
esperando al Presidente de España, José Luis Rodríguez
Zapatero para -si nada se tuerce- los primeros días de la
próxima semana. En su portada de ayer “Le Soir” confirma
“según fuentes diplomáticas españolas” la visita, “razón por
la cual habría sido liberado el senador Yahya” estima este
medio, mientras el diario arabófono “Aljarida” (El
Periódico) titula con toda oportunidad: “Zapatero en
Marruecos y los marroquíes manifestándose en Murcia”: hoy
domingo, la “Asociación de Trabajadores e Inmigrantes
Marroquíes” en España, ATIME (infiltrada por los servicios
vecinos desde los tiempos de Beyuki, personaje que supo
ordeñar un jugoso partido a la migración y que ahora ejerce
como concejal “progre” en una villa próxima a Tetuán),
coordina una protesta -citada por la MAP- frente a la
Delegación del Gobierno en Murcia. “Maroc Hebdo” dedica en
su edición del viernes tres páginas, informativamente
equilibradas, al “affaire Yahya”, el semanario “Tel Quel”
(edición de ayer sábado) informa profesionalmente sobre lo
mismo (“De hechos diversos a un asunto de Estado”), pero es
“Le Reporter” en su edición del viernes quien a estas
alturas parece no querer enterarse, al desinformar sin pudor
a sus lectores afirmando sin sonrojo (pág. 10) que “Las
autoridades españolas locales no han precisado las razones
de su arresto” (¿?).
Zapatero por su parte, en términos valientes y medidos si el
lunes o martes desembarca al fin en Marruecos, afirmaba el
viernes ante una entregada militancia durante el 37º
Congreso Federal del PSOE que “Compañeros de Ceuta y
Melilla, volveré” (¡pues bienvenido otra vez, Presidente!),
afirmación inmediatamente recogida por el joven y exultante
portavoz de los socialistas ceutíes en el congreso y asesor
de la Delegación del Gobierno en Ceuta, José Antonio
Carracao: “Desde el primer momento dijimos que el compromiso
de Zapatero con Ceuta era firme, constante, decidido e
inquebrantable”. Me alegro muchacho, miel sobre hojuelas.
Pero es el diario arabófono “Almassae” (La Tarde) quien en
su edición de este fin de semana aprovecha para realizar una
jugosa entrevista (con foto y en tres tiempos) a Gustavo de
Arístegui, portavoz del PP en asuntos exteriores y experto
en islamismo, quien sobrado de tablas y diplomáticamente
sortea con habilidad al periodista que pretende,
inútilmente, ponerle a porta gayola. Así, un templado
Arístegui responde que él no es quién “Por respeto a Mohamed
VI y a la soberanía marroquí” en comentar cierta pregunta,
señalando que los problemas derivados de la visita de los
Reyes de España a Ceuta y Melilla “estarían superados”;
además, matiza, “Soy muy amigo de Marruecos y para cualquier
gobierno español con cabeza Marruecos es una prioridad”;
finalmente y tras ser interrogado sobre si “las relaciones
bilaterales están frías por la actual política migratoria y
por el Sáhara”, un Arístegui muy seguro de sí mismo responde
que las actuales medidas con los inmigrantes en España son
“comunes a toda Europa, estoy hay que explicarlo muy bien”.
¿Y el Sáhara…?. Aquí Arístegui se luce a mi juicio: “El
proyecto marroquí de Autonomía para el Sáhara es un buen
camino”. Ciertamente. “Realpolitik” (y la infiltración
terrorista de “Al Qaïda” en el “Frente Polisario”) obligan…
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