Cientos de ceutíes festejaron ayer por todo lo alto el pase
de la selección española a la final después de que los de
Luis Aragonés derrotasen a Rusia en semifinales tras un
brillante partido.
Después de nada menos que 24 años, España volvió a meterse
en la final de un Europe, y lo hizo por la puerta grande.
Mientras tanto, durante los noventa largos minutos que duró
el encuentro, miles de ceutíes siguieron el partido en sus
casas y, sobre todo, reunidos en los diferentes bares y pubs
de la final unidos por un mismo sueño, por una misma
ilusión.
Todos ellos, tras el pitido final y el definitivo 3-0 en el
marcador, asaltaron las calles de nuestra ciudad -como otros
tantos miles de seguidores españoles hicieron en sus
repectivas ciudades- para celebrar y festejar el histórico
pase a la final del campeonato de su selección.
Son ya 44 los años que separan hoy de aquel triunfo sobre la
URSS que alzó al combinado español a lo más alto del fútbol
europeo. El domingo, España tiene una nueva cita con su
historia, con su fútbol, en la que estará respaldada por
millones de aficionados, entre los que se encontrarán los
miles de ceutíes que, en como cada partido de esta Eurocopa,
han seguido a su selección y la han subido, sobre sus
hombros, a la final de este histórico campeonato.
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