Dicen ahora, los que entienden,
que la Plaza Vieja y Patio Hachuel son la primera opción del
Gobierno para trasladar el Mercado. O sea, más claro, para
que todos nos entendamos, el Mercado no irá en la Manzana
del Rebellín.
Servidor piensa, ¡mira que pensar!, cuando eso es algo que
sólo le está permitido a las grandes “lumbreras” de esta
tierra, que con la Manzana aún hay mucha tela que cortar y
muchos intereses de los ceutíes que defender. Y como
resulta, que aunque yo soy una jartá de bruto al lado de las
“lumbreras”, pues me ha dado, desde esa brutalidad
concentrada en mí pobre cerebro por defender los interese de
las gentes de mí tierra que, en definitiva son los míos.
Y, naturalmente, mientras no se me explique con claridad
meridiana, todo cuanto pregunte, cosa que hasta ahora no ha
hecho nadie, seguiré preguntando y dando mí opinión, guste o
deje de gustar. Y no sé el por qué al hablar de esto, me
viene a mi pobre memoria, aquella canción que cantaba Sara
Montiel que decía: “Y el que quiera coger peces, que se
acuerde del refrán”. ¡Ele mí arte que no se puede aguantá!.
Aquí, en este asunto, no lo olviden, como he dicho
anteriormente, hay mucha tela que cortar. Y para cortar
tela, por supuesto, no ha nada mejor que ua buena modista,
que sea capaz de hacer un buen traje que lucir en fiestas y
saraos, sobre todo por parte de las “miembras”. Aunque e da
la sensación, no extraña que, precisamente, no serán las
“miembras” las que puedan presumir de un buen traje si acaso
los que pueda presumir serán los “miembros” de un traje
hecho, por el mejor de los sastres a medidas. ¿Quién será el
artista de la aguja y le hilo, capaz de confeccionar esos
preciosos ternos?. A servidor que lo registren, no tengo
idea de cortar trajes y, mucho menos, de poderlos
confeccionar a medidas de cada “miembro”.
Oiga, será una gozada ver a todos esos “miembros” lucir esos
ternos, cortados por el artista de la aguija y el hilo, con
todos los trajes iguales y salidos del mismo paño.
¡Marchando esos pedazos de trajes, que hay que lucir
palmito!
Me emociono nada más pensar ver, a todos esos como los niños
de San Idelfonso, ir vestidos iguales, para que no haya
diferencias en el costo de la prenda. Además que todos
llevarán los mismos bolsillos, para que nadie pueda presumir
de llevar más bolsillos donde meter, lo que se tenga que
meter. Y es que no puede haber diferencia alguna, para
evitar que se puedan enfadar entre ellos y, a algunos les dé
por contar cosas sobre la tela o el corte recibido y la
falta del bolsillo que le ha hecho a su traje donde poder
meter la cartera. Y las carteras son como las madres, que
nada más que hay una.
Me estoy liando más que a pata de un romano. O sea que estoy
más liado que la propia manzana, que me tiene dividido al
personal, más que está el partido Popular. Y servidor si una
aval para poder comprarme un coche y Rajoy que dicen le
sobran avales. Hay siglos que no está uno para nada.
La manzana que me hace darle a mí cabeza más vuelta que una
noria. Y lo que te rondaré morena. ¡País!
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