“Muy satisfecho” con el trabajo realizado durante los
últimos cuatro años, el director provincial saliente del
MEPSYD, Juan José León Molina, que dejará el curso y el
controvertido proceso de escolarización para el próximo año
académico prácticamente finiquitado, lamentó ayer como gran
lunar negro de su segunda etapa en ese puesto [ya lo había
ocupado entre 1983 y 1986, antes de presentarse al Congreso]
la “escasísima colaboración” que, según lamentó, le ofreció
desde 2004 la Ciudad, especialmente para el desarrollo de
infraesctructuras que finalmente han quedado pendientes.
León Molina tuvo ayer palabras de agradecimiento para todo
su equipo, para la FAMPA y especialmente hacia su ex
presidente, Francisco Cuesta, e incluso para la Junta de
Personal, con la que “nuestros lógicos roces nunca llevaron
la sangre al río”. “En política se está para servir y no
para beneficiarse, y el de la Educación es un gran reto
social en el que deseo la mejor suerte a mi sustituto”, dijo
León Molina.
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