Habéis venido, putas hijas de
españoles!”, espetó brutalmente a la cara de unas infelices
adolescentes de Sidi Ifni un no menos brutal miembro de las
¿fuerzas del orden? en clara referencia a la antigua
provincia nº 51 del Estado español bajo el régimen
franquista, hasta 1.969. La cita está sacada de la edición
del miércoles de ‘Al Ahdath Al Maghrebía’, que publica la
foto de una de las afectadas. Valiendo más tarde que nunca,
la prensa arabófona marroquí que no yanta del pesebre
comienza a afilar sus plumas: en su nº 538 ‘Almassae’ (La
Tarde) recoge las críticas de la “Asociación Marroquí de
Derechos Humanos” (AMDH) a la actuación del general Hamido
Laânigri (mostrando una foto del mismo vestido de civil),
cuestionando su labor en Sidi Ifni , así como la del
gobernador de la provincia de Tiznit y hasta la del mismo
ministro del Interior, Chakib Benmoussa; el diario informa
además sobre la barbarie policial contra indefensos
ciudadanos ¡violentados en sus propias casas mientras
dormían!; en cuanto al órgano del PJD “Justicia y
Desarrollo” (de los islamistas parlamentarios) exige, en la
portada de su nº 133, la apertura de una investigación. ¡Lo
acontecido en Sidi Ifni es muy fuerte!: mantener el orden,
desde luego; pero brutalidades, acoso e impunidad policial,
para nada. Este sufrido y paciente pueblo marroquí empieza a
no soportar ya más excesos, ¡quiere vivir dignamente!. Y el
horno, saben, no está para bollos.
En honor a la verdad debo decirles que en el Estado marroquí
algo empieza a moverse. Así, el miércoles en la Cámara de
Representantes (donde acaba de constituirse una comisión de
investigación parlamentaria) el ministro del Interior hubo
de responder a una pregunta oral del PJD y el “wali” de
Agadir, Rachid Felali, ha saltado a la palestra para, sin
arrugarse, adelantar la apertura de investigaciones
oficiales sobre lo sucedido, mientras alienta a la vapuleada
y desmoralizada población de Sidi Ifni a presentar denuncias
en las comisarías. Vale pero, ¿en cuáles señor “wali”…?
Puedo asegurarle que la ciudadanía tiene miedo; y rabia. Me
permito sugerirle el desplazamiento a la ciudad de oficinas
móviles al cargo de personal educado y solvente, créame. ¿Y
el Rey…? Mohamed VI sigue en su gira fuera de Marruecos,
pero cuando vuelva seguro que va a cogerse un cabreo de esos
que hacen época… Un hombre sin duda fiel a la Dinastía Alauí
como el general Laânigri va a verse obligado a explicar,
pese a su celo e intenciones, los desmanes de las Fuerzas
Auxiliares bajo su mando que vulneran, no solo el espíritu y
los nuevos aires democratizadores, sino las instrucciones
impartidas y los cambios introducidos por el joven soberano
desde su llegada al Trono. Es evidente que, pese a los
esfuerzos de Laânigri, sus hombres adolecen en general de
una formación adaptada a los nuevos tiempos que corren en
los que, cualquier torpeza, echa por tierra la buena y
merecida imagen de un país… y hasta la de un reinado.
Iba hoy a escribirles unos apuntes sobre la histórica
rebelión jariyita en el Maghreb, pero ya ven: se cruzó Sidi
Ifni -con sus sufridos pobladores, unos cuantos de nuestra
sangre- por el camino. No se preocupen, cualquier día de
éstos buscaré un hueco para abordar el tema así como la
huella de los tres reinos jariyitas de étnia amazigh.
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