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Ayer soltó el amarre en Ceuta el ‘Thomson Spirit’, crucero
de la compañía naviera Louis Cruise Line que transporta a
unos 1.200 turistas que fueron recibidos por dos guías de la
oficina de Turismo. Este servicio informó que sólo 80
visitantes marcharon hacia Marruecos y el resto conoció la
ciudad, fletados desde el Dique de Poniente hasta el centro
en los autobuses de Flandria.
La mayoría de la tripulación que llegó ayer a bordo del
crucero ‘Thomson Spirit’, de la naviera ‘Louis Cruise Line’,
optó por conocer los encantos de la ciudad en vez de pasar
la frontera del Tarajal rumbo a Marruecos. Y es que de los
1.200 turistas que viajaban a bordo de este magnánimo
crucero de casi 215 metros de eslora, tan sólo 80
prefirieron emprender el camino por carretera hacia el país
vecino. El ‘Thomson Spirit’ atracó en el Dique de Poniente
sobre las nueve de la mañana, y, tras descender por la
pasarela por estribor la tripulación fue recibida por dos
preciosas guías de la Oficina de Turismo de la Ciudad, que
informaron a pie de muelle sobre la posibilidad de tomar
rumbo en autobús hacia la frontera, para pasar el día de
compras, o dejarse seducir por el atractivo de la ciudad en
un circuito medido para disfrute de los visitantes, en su
mayoría ingleses.
‘Flandria Viajes’ aportó una flota de autobuses, cinco, que
condujeron a los turistas al centro, lugar desde el cual
conocieron los puntos más importantes de la ciudad. Según
nos explicó una guía de Turismo, los visitantes conocieron
“el centro de la ciudad, donde pudieron hacer sus compras;
visitaron el Museo del Revellín; daron un paseo en kayak, se
les mostró la catedral de Virgen de África, así como la
Basílica Tardorromana”.
Se trata de la quinta escala de este buque en dos semanas,
que parará unas diez veces en distintos puertos europeos. El
buque volverá a repetir visita en los meses de julio,
septiembre y octubre.
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