Un joven marroquí de 29 años ha hallado la muerte
cuando intentaba, por el método del escalo, penetrar en una
vivienda ubicada en la quinta planta del número 10 de la
calle García. Según las primeras hipótesis, el individuo
había logrado acceder a la última planta del piso y
pretendía descolgarse desde lo más alto hacia alguna ventana
propicia para penetrarQuiso penetrar en una vivienda con
intenciones poco lícitas pero la mala fortuna y la gravedad
le jugaron la última mala pasada a un joven marroquí de 29
años que se precipitó al vacío desde lo más alto del
edificio número 10 de la calle García a donde logró acceder
con cierta facilidad alrededor de las 20’00 horas de la
tarde.
Subió por sus escaleras e intentó sin conseguirlo acceder a
la cubierta [huellas en la pared y las escaleras
semidesplegadas dan cuenta de sus intenciones]. Al no
lograrlo, abrió un ventanal al ojo de patio interior ubicado
en el pasillo de la quinta planta. Subido en su quicio, el
siguiente paso fue el apoyo hacia una ventana lateral con
ciertas posibilidades de acceso. Sin embargo resbaló.
Los tendederos arrancados de cuajo ofrecían detalles de cómo
debió ser la caída. Se intuían los desesperados intentos de
aferrarse, sin éxito, a cualquier extremo que evitara el
desastre.
El golpe seco y el chasquido oído por los vecinos [quienes
buscaron de dónde salió semejante ruído], les hizo comprobar
el dantesco espectáculo de un hombre tendido, manando
abundante sangre de la cabeza. Avisados bomberos, Policía
Local, Nacional, 061, no pudieron hacer más que certificar
la muerte mientras la Policiía Judicial iniciaba la
investigación.
|