Con toda la pompa y parafernalia propia de los mejores
eventos, la Ciudad Autónoma de Ceuta entregó en el salón del
Trono del Palacio de la Asamblea los ya tradicionales
‘Premios Encina’, en su edición de 2008, que reconocen la
labor dedicada y voluntaria en beneficio del Medio Ambiente.
En un día en que, además, siempre se hace coincidir, se
conmemoraba el Día Internacional del Medio Ambiente. La
consejera del área, Yolanda Bel abrió un discurso
institucional en el que, antes de proceder a la entrega de
los galardones, reconoció la labor de su equipo de
colaboradores de la Consejería y de los funcionarios y
personal laboral.
No faltó nadie a la cita institucional con el Medio
Ambiente. Las primeras autoridades de la Ciudad se apostaron
en sus lugares de preferencia reservados en un bien
preparado Salón del Trono que acogió el acto de entrega de
los Premios ‘Ciudad de Ceuta de Medio Ambiente’ más
conocidos como los ‘Premios Encina’.
Allí estuvieron presentes el delegado del Gobierno, el
comandante general y el presidente de la Ciudad, así como
antiguos premiados de este galardón que se otorga desde
1998.
Se valoraba la labor en pro del medio y, un año más, la
Consejería de Medio Ambiente ha estado bien atinada. La
comisión de los Premios, el jurado calificador, dictaminó
por unanimidad que en esta edición el premio reconociera la
tarea del conocido joyero, Carlos Chocrón quien junto a la
firma ‘Patek Philippe’ y la ayuda de los rotarios ceutíes,
han plantado nada menos que 6.500 plantones de árboles en
los montes de Ceuta.
Una tarea que ha sido felizmente reconocida y que se ha
traducido en la concesión de un merecido galardón.
Antes, la consejera de medio Ambiente de la Ciudad Autónoma,
en un discurso institucional, hizo referencia a la vital
importancia de la concienciación ciudadana en el respeto a
la naturaleza. “Nonos debemos convertir en una amenaza para
el Medio Ambiente”, sentenció en la jornada en que se
celebraba precisamente el día mundial del Medio Ambiente.
Bel destacó que los ciudadanos “somos verdaderos agentes
activos en ese desarrollo sostenible de nuestro entorno
inmediato”. Y valoró el objetivo “irrenunciable” de darle
cara a los asuntos medioambientales.
“El Medio Ambiente no debe ser considerado como algo
abstracto, sino como algo real que está en cada una de las
personas”, señaló.
Llamó la atención a la responsabilidad ciudadana por el bien
futuro de conservarción del entorno natural “que repercutirá
en el bienestar de todos”. Valoró las palabras del
secretario general de la ONU al respecto, destacó al
galardonado, Carlos Chocrón por su bien ganado premio así
como al colegio público Mare Nostrum y cerró su discurso
agradeciendo en primer lugar el trabajo desempeñado por la
la ex consejera de Medio Ambiente, Carolina Pérez, así como
la labor de todos y cada uno de sus colaboradores
[viceconsejeros, directores gerentes] y personal funcionario
y laboral, en un repaso por las empresas municipales de su
competencia: Acemsa, Obimasa y Obimace.
Carlos Chocrón
El presidente de la Ciudad hizo entrega del premio de Medio
Ambiente a Carlos Chocrón quien tuvo unas breves palabras
para expresar la “reconfortante sensación” por la labor
desarrollada “por muchas personas. Destacó el interés del
Gobierno de la Ciudad en su iniciativa, el apoyo del equipo
de su empresa, a la firma ‘Patek Philippe’ y los rotarios
ceutíes. “El Premio Encina ha entrado en la historia de mi
familia. Mentalizaré a todos ellos de mi tardía
sensibilización econlógica”, concluyó el premiado.
Mare Nostrum
La directora del centro, Ana María Beltrán recogió la
mención honorífica de manos de la consejera de Medio
Ambiente, Yolanda Bel y se mostró agradecida por la
colaboración hacia su colegio.
El Mare Nostrum cuenta con un huerto escolar en el que los
profesores participan en la concienciación medioambiental en
edades tempranas entre los alumnos, algo que ha merecido el
reconocimiento de la Ciudad Autónoma.
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