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Para que yo pueda estarme quieto,
mirando la pantalla del televisor, han de tener en antena
una producción de categoría. Una buena serie televisiva.
Como hasta la fecha no me gusta nada de lo que echan en la
caja tonta, salvo los lunes y martes (CSI y House), mis
inquietudes se destapan y me conducen a meterme de cabeza en
Internet.
De las miles de noticias que aparecen en el monitor,
provinentes de miles y miles de páginas web, algunas tienen
interés y otras, las más, no dejan de ser disquisiciones de
algún desequilibriado. Una de las que tienen su “miga” es la
que comporta el visionado de algunos vídeos filmados con
cámara de aficionados o con móviles.
Pero no voy a escribir del tema de Internet, sino de la
actualidad religiosa de la llamada Iglesia Católica
Apostólica y Romana.
Creía, sinceramente, que la Inquisición había desaparecido
del mapa. Craso error. Sigue vivita y coleando además de
arreando.
Ahora no se llama Santa Inquisición, ahora lleva el rótulo
de Congregación para la Doctrina de la Fe que es lo mismo
aunque sin llegar a las atrocidades de aquella.
La mujer siempre está vista por la Iglesia Católica como un
ser inferior, del averno, culpable de todos los males que
aqueja a la religión. Aquí, y en otras muchas cosas, no se
diferencia del Islam.
Lo último del Vaticano ha sido establecer la excomunión
automática para las mujeres que se ordenen sacerdotes y a
los sacerdotes que ordenen a las mujeres.
El objetivo que se persigue con ésta decisión es tutelar la
naturaleza y la validez del Orden Sagrado…
Para el Vaticano no existe la igualdad, de hecho no tiene
siguiera un ministerio afín, y mantiene la condición de la
mujer como ser inferior… para hacerles la comida y la cama.
Un contrasentido si por un lado elevan a los altares a
mujeres santas, sin contar con la Virgen que tiene trono y
corona, y por otro lado les niega el sacerdocio.
Todavía falta unos días para la reunión del ejecutivo
episcopal, el 11 de junio, en la que se convocará al
presidente de la Cope y ya andan creando órdenes
discriminatorias que afectan a la mujer.
Lo que han hecho es un Decreto General en el que tachan de
delito la ordenación sagrada de una mujer, en realidad el
decreto establece que tanto quien confiere el Orden Sagrado
a una mujer, como la mujer que lo recibe, incurren en la
excomunión latae sententiae reservada a la Sede Apostólica.
Desde hace años vienen ordenándose sacerdotisas mujeres de
Suiza, Canadá, Estados Unidos, Austria, Alemania, etc.
Sin embargo, el Vaticano admite que existe vida en otros
planetas e incluye la contaminación como nuevo pecado del
siglo XXI.
¿Por qué niegan un derecho inherente a un ser humano? ¿Acaso
las mujeres no son criaturas de Dios? Si el mismo Dios creó
a la mujer…
Desde siempre se ha sabido, principalmente desde los tiempos
de Miguel Ángel, que la Iglesia persigue a la mujer más por
miedo que por otra cosa. Saben que la mujer tiene un don que
los supera en muchas cosas. Una fe probada que las hacen
mejores que los hombres para las cosas sagradas… de eso
tiene miedo la Iglesia Católica Apostólica y Romana (ICAR),
otra cosa no explicaría esa rotunda marginación.
El machismo declarado de la curia romana hace juego con el
sector mas reaccionario de la religión y que a veces los
llegan a comparar con la Mafia o la Camorra. ¿Que no?, a
ver, expliquen Vds. que pasa con el escándalo de corrupción
en Italia, sobre una trama de contratas en centros públicos
en los que están implicados los altos poderes vaticanos. Ya,
ya sabemos que es en Italia, país matriz de tantos mafiosos,
muchos de ellos exportados en tiempos pretéritos a otros
países donde usaban, ¿usan?, el apelativo de gansters…
cuando el dinero tira…
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OPINIÓN / LAS NOTAS DEL QUIM
