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OPINIÓN - SÁBADO, 31 DE MAYO DE 2008

 

OPINIÓN / PERSONAL Y TRANSFERIBLE

¿Información, opinión o crítica?
 


Domingo Ramos
domingoramos@elpueblodeceuta.com

 

Hemos comentado en mas de una ocasión los desagradables comentarios que Federico Jiménez Losantos viene vertiendo en su programa diario de radio “La Mañana” de la Cadena COPE, arreciando en sus expresiones nada favorables hacia, su última “conquista”, Alberto Ruiz Gallardón, con quien mantiene un agrio soliloquio, aun cuando no deja de la mano sus ataques más furibundos hacia Rodríguez Zapatero, María Teresa Fernández de la Vega y, últimamente, contra Zaplana, Acebes y especialmente contra Mariano Rajoy, a quien ataca desmesuradamente. A Alberto Ruiz Gallardón le ha llamado de todo, desde traidor hasta que va a sumir al Partido Popular en lo mas hondo y, lo que ha llevado a éste último a querellarse contra él, la expresión de que “le da igual que haya doscientos muertos y mil quinientos heridos con tal de llegar al poder”, refiriéndose al atentado del 11 M.

Pensamos, y esto ya lo hemos comentado en alguna ocasión, que su función es alardear diariamente de sus improperios hacia los “maricompeljines”, “las de la Vogue”, los del “Grupo Risa”, “Rubalcasco” hasta “Carcalejos” (director del diario ABC) y “Luís del Colmo” (director-presentador del programa “Protagonistas”) algunos de los sobrenombres con que se refiere a los “actores su programa matinal” director-presentador del programa radiofónico “Protagonistas”, el segundo, quienes han expresado públicamente su contrariedad sobre tales manifestaciones del “Pequeño Taliban”, “Radio Predicador” o el “Mayor faltón profesional del Reino”.

Y lo peor del caso es que Federico Jiménez Losantos, que presume de liberal, se está cargando al Partido Popular y a sus dirigentes, habiendo logrado el enfrentamiento entre los mismos al dar constantemente pábulo, deformándolas, a cuantas manifestaciones o acciones se vienen llevando a cabo por los prebostes de dicho Partido, consecuencia lógica, nos referimos a estas contradicciones, a las secuelas por haberse perdido unas elecciones y en puertas de la celebración de un congreso nacional, tal y como le sucedió al Partido Socialista con Felipe González, Alfonso Guerra, Joaquín Leguina, Borrell, Almunia y Boyer, pongamos por caso, sin olvidarnos del “opositor” García Santesmases, por cierto quien hace tiempo definió a Jiménez Losantos, a nuestro parecer, muy acertadamente, ya que consideraba “que en lugar de difundir la doctrina del Vaticano, éste defiende unas ideas completamente vinculadas a la constelación neoconservadora protestante y a la doctrina de la derecha norteamericana mas dura”.

Una cosa es la información (que trata de difundir hechos verídicos o conocimientos adquiridos), la opinión (dictamen o juicio que se forma de algo cuestionable o forma o concepto que se tienen de alguien o de algo) y la crítica (examen y juicio acerca de alguien o de algo), y otra muy distinta la que lleva a cabo todas las mañanas Federico J. Losantos con el objetivo determinado y, por lo común, con el fin siniestro, a través de máximas y conceptos totalmente irreverentes, que no concuerdan con la realidad ni pueden ser considerados dentro de la normas de civismo que deben imperar dentro de la convivencia humana. Y menos, provenientes a través de una emisora de la Iglesia con la cual ahora mantiene cierta prudencia en sus referencias a la misma, aunque estamos seguros que en cuanto las cosas no le vengan a su antojo, el implacable F. J. Losantos, como lo ha demostrado con el Partido Popular y sus dirigentes, empleará toda su artillería dialéctica contra el clero, sus sacerdotes, prelados y hasta con el mismísimo Santo Padre.
 

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