Sevillano de Utrera, aunque gaditano de corazón y
convicción, José Fernández Chacón encontró el espíritu de la
política en los pasillos de la universidad, en los tiempos
en los que se cruzaba con Alfonso Guerra o Felipe González
quienes “influyeron muy mucho en mi vocación”. Un lapso de
tiempo sin degustar la filosofía de la política hasta su
etapa gaditana, “me invitaron a ingresar en el PSOE”. Fue
secretario general, teniente alcalde de Cádiz, senador y
diputado, antes de ser delegado del Gobierno con Zapatero en
Melilla y ahora en Ceuta. Amigo de sus amigos, Fernández
Chacón lo es de Salvador de la Encina, su principal valedor.
Promete dejar atrás la crispación melillense y afrontar
desde el diálogo y la colaboración su nueva etapa en Ceuta
“mucho más cerca de mi familia” gracias al talante del
presidente ceutí, Juan Vivas, “lo que agradezco”.
Pregunta.- Para José Fernández Chacón ¿qué es la
política?
Respuesta.- Es el espacio en el cual los ciudadanos
encuentran soluciones a sus problemas, es una
responsabilidad de todos y donde todos debemos participar.
El destino de un país y de una comunidad está ligada a las
reglas de la política y en ese sentido cada uno, en su
papel, tiene una obligación moral con la política. Unos
simplemente yendo a votar y otros, como es mi caso, dejando
al lado tu vida profesional y vocacional para cambiarla por
otra vocación de servicio público que llega a cambiar toda
tu vida. La política tiene, en sí sus durezas y
evidentemente quien no tenga vocación la dejará para buscar
otras formas de participación.
P.- Lo digo porque ya sabrá que, en ocasiones, un
político debe soportar presiones de entornos mediáticos. Y
en Ceuta hay verdaderos diplomados en este cometido. ¿La
mejor fórmula es la independencia?
R.- Para hacer creíble el trabajo uno intenta mostrarse
independiente [a veces se consigue y a veces no]. Pero en el
espacio en el que va dirigida la pregunta que es en el mundo
de la información o de los intereses mediáticos, entiendo
que la información es un ejercicio de libertad de expresión.
Tiene que ser así. Pero también tiene que haber igualdad de
trato y oportunidades para todos los medios de comunicación.
Eso lo intento todos los días. A veces lo consigo y otras
no, pero el día que no lo consiga será porque haya habido
algún error que asumiré con gusto para tratarlo de corregir
después.
P.- Al ser un hombre de principios, ¿cuáles son las
cualidades que debe adornar a un político?
R.- Primero la honestidad y tener presente que la justicia
social tiene que primar en las decisiones que se adoptan.
Siendo honesto y justo, el parámetro de la legalidad es un
añadido irremplazable para cualquier cargo público. Ocupa un
puesto elevado en este ranking la dedicación y el trabajo
ante el compromiso que se asume, así como el oir a la gente,
escuchar a las personas. Son herramientas de trabajo muy
eficaces porque uno no está siempre en posesión de la verdad
y cuanto más conozca menos falla.
P.- La veteranía en política, como en todo, ¿es un grado?
R.- lo es porque esto te ayuda a aguantar, a veces,
determinadas situaciones incorrectas alejadas del respeto
político e institucional en el que siempre me he movido
P.- Pues en Melilla le habrá servido porque el
‘compañero’ Imbroda fue un hueso duro de roer
R.- La veteranía de la que hablaba me hizo aceptar la
situación, aunque las formas no me apearon de lo que tenía
que hacer en función de en lo que creía y creo, por mucha
que sea la crítica política o el ruido que se quiera montar.
Siempre digo que frente al ruido, trabajo; frente a la
crispación, sosiego y diálogo. Esto lo he aplicado en
Melilla pese a todo y lo volvería a hacer.
P.- Nada que ver lo que deja en Melilla, en ese sentido,
con lo que se barrunta en Ceuta. Imbroda y Vivas pertenecen
al mismo partido pero tienen dos formas diametralmente
opuestas de entender la gestión con el adversario político.
Así que, mucho tendrían que cambiar las cosas, para romper
el ‘noviazgo’ institucional con el presidente de la Ciudad
Autónoma, Juan Vivas
R.- Estoy percibiendo un ambiente distinto, lo que agradezco
porque me hace sentir muy cómodo. Porque creo que la
política es el arte de guardar las formas que son muy
importante. No es lo mismo tener una relación institucional
cuando los dos representantes no guardan esas formas. Aquí
sí se guardan y eso lo agradezco tanto al presidente de la
Ciudad como a muchos representantes de otras organizaciones
de la ciudad con los que ya he tratado. A ellos les quiero
corresponder del mismo modo porque creo que ese es el camino
positivo para todos.
P.- Ha asegurado en varias ocasiones que el destino de
Ceuta era algo solicitado por usted, incluso antes de haber
ido a Melilla
R.- Realmente yo me siento muy gaditano y Ceuta ya conocía
que tenía mucha relación con Cádiz, mi provincia. El
carácter de mucha gente de Ceuta tiene mucho que ver con la
provincia. Eso para mí ya tiene un atractivo importante. Mi
familia vive en Cádiz, eso quiere decir que estoy más cerca
de ellos y tengo más facilidad de movimientos como para
atender cualquier coyuntura y regresar en el mismo día. En
cualquier caso, agradezco al Gobierno que haya facilitado el
venir a Ceuta, porque efectivamente ya quería haber venido
hace cuatro años, y porque aquí hay personas del partido a
las que aprecio sinceramente.
P.- Dicen que Salvador de la Encina es una de las
principales piezas de su brújula en Ceuta
R.- Salvador, que es un gran amigo mío, siempre es una gran
ayuda contar con él porque conoce muy bien Ceuta. De alguna
manera desde que es diputado, el partido le encargó
vehiculizar los problemas de la ciudad en el Congreso.
Evidentemente es de agradecer que esa experiencia de
Salvador con Ceuta me la brinde. Lo que, por otra parte,
provoca que me sienta también a gusto con ese espacio del
partido que él está llevando ahora en la ciudad.
P.- Ceuta y Melilla, similares pero no iguales. ¿se va
poniendo al día?
R.- Ceuta y Melilla tienen problemas comunes aunque son
diferentes también. No son exactamente iguales. Si nos
referimos al transporte, no existe la misma dimensión en un
sitio que en otro. Melilla está más aislada por estar más
lejos y está obligada a que un barco haga un trayecto diario
de ocho horas o contar con un fast ferry que tarda tres
horas y media. Eso sí hay aeropuerto; pero en definitiva,
Ceuta está mejor comunicada y más en contacto con la
península. Las dos ciudades al no tener tejido industrial
cuentan con dificultades en actuaciones con el empleo.
Tienen un REF similar, pero también disponen de diferencias.
En Ceuta existe mucha permeabilidad entre el peninsular y el
ceutí en ambos sentido del Estrecho, algo que en Melilla por
la distancia es más complicado. Esa permeabilidad imprime
carácter en la ciudad.
P.- ¿Cómo se ha encontrado a Ceuta?
R.- Me la encontrado como una ciudad muy moderna, dinámica y
muy de la gente que vive en la calle y eso es muy positivo.
He visto una ciudad muy limpia, al menos en la parte que yo
conozco porque aún me queda por visitarla en toda su
extensión. En Ceuta veo en la calle la amabilidad de sus
gentes; una ciudad amable, luminosa que hay que darla a
conocer mucho más en la península para que la conozcan y la
disfruten.
P.- En su agenda de trabajo qué ha marcado para acometer
con inmediatez
R.- Las insfraestructuras y potenciar la inversión, sin
duda. Tendremos que contar con otras instituciones como el
Gobierno local, pero las infraestructuras y las invesriones
son absolutamente necesarias para el desarrollo de los
pueblos. El nuevo hospital, las nuevas sedes de la Jefatura
de Policía, la Comandancia de la Guardia Civil, el nuevo
Palacio de Justicia, el Centro penitenciario y sin olvidar
los equipamientos docentes, viviendas y equipamientos
sociales. Todo ello genera una inversión de tal calibre que
de hacerlo se logrará riqueza y empleo además de modernizar
aún más la ciudad situándola en buena posición para afrontar
los retos del futuro. Las inversiones públicas deben generar
riqueza inducida, lo que significará que se trabajará por el
empleo alrededor de las infraestructuras que se van
ejecutando.
P.- Pero hay más...
R.- Sobre todo el área de Educación. Nos parece que debemos
aportar más. Debemos recomponer la situación del fracaso
escolar en Ceuta. Tenemos que potenciar aquellas carencias
detectadas y proponernos entrar en las ratios medias
nacionales relacionadas con este parámetro. Así que debemos
combatir el fracaso escolar, mejorar la educación de los
ceutíes... retos para cuatro años muy importantes.
P.- El Tarajal como aduana comercial ¿es un reto?
R.- De momento es una diferencia con Melilla que mantiene
una aduana reconocida desde la época de las minas del Rif,
por el volumen de material que se transportaba. Realmente
para que haya una aduana comercial depende de la voluntad de
dos países. Nosotros canalizaremos las inquietudes de Ceuta
al Gobierno, pero depende de la voluntad política de dos
países.
P.- ¿Y la colaboración marroquí con la inmigración?
R.- Tenemos una colaboración magnífica del Gobierno de
Marruecos y es un asunto por el que seguir trabajando en el
futuro dando un mensaje claro. La Inmigración debe ser legal
y ordenada. La inmigración ilegal no es tolerable, incluso
ni para los propios inmigrantes que son utilizados por las
mafias. Creo que en Ceuta se están haciendo las cosas bien y
debemos seguir trabajando sin bajar la guardia porque las
mafias trabajan sin descanso. Ahí las Fuerzas y Cuerpos de
Seguridad del Estado trabajan magníficamente bien. Tenemos
claro que la política a seguir es mantener la colaboración
con Marruecos y al mismo tiempo ir potenciando nuestros
medios técnicos y humanos en la frontera. Eso garantiza el
que podamos trabajar durante los próximos cuatro años.
P.- El transporte marítimo es casi un motivo de
preocupación constante para el ceutí
R.- Estoy conociendo los problemas del transporte aquí. Por
lo que veo la gran critica se produce en cuanto a la calidad
del servicio y al incumplimiento de los horarios. Ya he
contactado y he hecho mis gestiones con la Dirección General
de la Marina Mercante y he trasladado al director general mi
inquietud al respecto. Voy a trabajar en ese sentido, pero
no quiero trabajar solo. Quiero trabajar con el apoyo del
resto de las instituciones para conseguir la mejora de la
calidad que es una de las demanda del ceutí
P.- La Ciudad ha denunciado ante Competencia lo que
parece una concertación en los precios
R.- Este asunto de los precios y de las tarifas es más
complejo porque es de libre competencia. Lo que debemos es
estar atentos porque exista siempre competencia. Desde el
punto de vista del Gobierno poco podemos hacer más que estar
vigilantes junto a la Ciudad Autónoma para que no perjudique
el ciudadano. Lo que sí aseguro es que vamos a trabajar en
todos los frentes. En algunos casos solos porque será de
nuestra responsabilidad, en otros, colaborando con otras
instituciones.
P.-NIveles altos de paro, planes de empleo que palían de
hoy para mañana esos negativos números, pero poca economía
productiva
R.- Cuando se habla de empleo no se puede apuntar solo en
una dirección. En empleo los responsables son el Gobierno
con medidas generales para favorecerlo, la Ciudad Autónoma
tiene una responsabilidad amplia en la generación de empleo
y los empresarios también. No hay mucho tejido productivo
porque no hay suelo para instalar industrias y quien tiene
el suelo es la Ciudad. Hay que hacer esfuerzos, pero el
Gobierno debe favorecer el empleo a través de medidas
generales que ya están en práctica, por ejemplo la
bonificación al 40% de las cuotas a la Seguridad Social, y
los planes de empleo que son necesarios por la falta de
horizonte inmediato de trabajo en muchos ciudadanos. En este
sentido vamos a extenderlos a más personas reduciendo los
planes de nueve a seis meses para que puedan llegar a más
parados. Debemos formar al trabajador de los planes. En
Ceuta disponemos de dos importantes responsabilidades, de un
lado atender a la ciudadanía sin trabajo con los planes de
empleo, y por otro formarlos a través de cursos y programas.
P.- Pero, ¿y el futuro del empleo?
R.- Nos preocupa mucho evidentemente. Los Planes de Empleo
palían el problema, pero en el futuro de la ciudad
intervienen muchos factores, entre ellos la propia Ciudad
Autónoma que también puede liberar suelo para construir
pequeños polígonos industriales para disponer de un cierto
tejido productivo. Evidentemente con el Gobierno central
detrás apoyándola, porque en la solución del futuro de la
ciudad debemos estar todos.
P.- Habla permanentemente de formas y de colaboración. Me
da la sensación de que sus relaciones aquí en Ceuta van a
ser diferentes a las que tuvo en Melilla
R.-Es que el camino es la colaboración, la cooperación, la
lealtad institucional. En Melilla lo que ocurrió fue que una
institución adoptó la postura de lo que debe hacer un
partido político. Es decir, se puso al frente del partido y
no se puede estar permanentemente utilizando una institución
para ir políticamente en contra de otra Administración. Eso
dificultó mucho las posibilidades de entendimiento y se
frenaron inversiones importantes por esa postura política
adoptada por todo un presidente de la Ciudad. En lugar de
que fuese el Partido Popular el que entrara en el debate
político, entró la institución fomentando la crispación
institucional y fue un clima muy difícil de trabajo. Aquí,
en Ceuta, la Ciudad lo entiende de otra manera y yo me
alegro.
Entiendo que la discrepancia política debe existir, es
lógico, pero en el foro adecuado porque entre las
instituciones lo que debemos hacer es cooperar y fomentar el
entendimiento. Ojalá podamos decir dentro de cuatro años que
gracias a esa cooperación y colaboración, los ceutíes han
ganado tanto en Educación, como en inversiones viarias,
Sanidad, Transporte, Empleo... Es mejor sumar que restar
P.-Por tanto queda claro, por su respuesta, que usted no
será un delegado que utilice la institución como una saeta
del Partido Socialista.
R.- Nunca. Creo que la institución debe mantenerse al margen
de la vida partidaria o partidista que tiene sus foros
adecuados. Si la institución lo hace bien quien más se
beneficia es el partido político que la representa. Ahora
bien, esta institución tiene una misión, que es que dentro
de cuatro años los ceutíes vivan mejor que hoy y esa es la
única regla en la que yo me voy a ocupar durante los
próximos años.
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