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Me parece interesante que se
anuncie así, a la misma entrada de la ciudad, pero me
parecería mejor que, eso estuviera a tono con la realidad de
cada día, porque es difícil encontrar ninguna ciudad como
esta en la que un sábado por la tarde, por ejemplo, no
puedas comprarte unas zapatillas, si las necesitas, puesto
que todo está cerrado.
En más de una ocasión ya hemos tocado este asunto, y en
todas esas ocasiones hemos concluido que es difícil hacer
una ciudad de compras si tienes los establecimientos
cerrados.
Siempre salen a escena los mismos problemas, los convenios
en los que intervienen, entre otros, los sindicatos. Y me
parece muy bien que los sindicatos miren por los
trabajadores, pero posiblemente fuera más interesante que
esos sindicatos les pagaran la nómina a los que no tienen un
trabajo. Ahí si se estarían preocupando de verdad, donde no
se preocupan es donde hay un puesto que puede ocupar una
persona y por exigencias “reivindicativas” el puesto ese no
se cubre y el que lo iba a ocupar se queda mirando al sol.
Hace unos días, leíamos en varios medios de comunicación,
como en Madrid, por ejemplo, en toda la zona comercial del
centro se establecía un horario libre para los
establecimientos comerciales, horario libre que podrá llegar
en breve a horario continuo de día y de noche, para aquellos
establecimientos que lo consideren oportuno establecerlo, en
el centro o en otras partes.
Con esto se abren varias puertas, la primera para el
cliente, que puede tener un horario rígido en su trabajo y
podrá comprar cuando salga de trabajar, en segundo lugar,
que los establecimientos que quieran podrán estar abiertos y
podrán vender más, y como consecuencia de todo esto podrán
crear más puestos de trabajo.
A Ceuta esas cosas no parece que vayan a llegar y no sabemos
si es que los comerciantes se conforman con lo que tienen:”
La cosa está mal”, o si buscan sólo hacer cuanta más caja
mejor, trabajando poco, o si es que al verse con los
sindicatos les llega el síndrome de “congojonitis”, ellos
sabrán.
Esto sobre “la ciudad de compras”, pero más llamativo es que
una ciudad que quiere ser turística, desde la propia Policía
Local, se “espante” a los turistas que vienen con su coche
al hotel.
Ahora mismo, estoy escribiendo el domingo por la tarde a las
cinco y media de la tarde llegan varios clientes “echando
chispas” al Hotel La Muralla. Venían con sus coches, se
dirigían hacia el parking del hotel y la Policía Local no
les ha dejado que llegue porque va a haber una procesión.
Lo primero es que la procesión es a las ocho de la tarde, y
lo segundo es que esa procesión no pasa por el parking del
Parador de Turismo. Ya se pueden imaginar como han llegado
esos clientes a ocupar su plaza en el hotel, pero lo que más
me ha dolido es que uno de ellos, italiano por más señas,
renegando del trato o las atenciones que se le habían dado
por parte de los que controlaban el orden o la circulación
decía:”No volveré más a Ceuta”. Esto es lo que hay y la
pregunta no puede ser otra más que ¿Así se quiere hacer
ciudad turística y ciudad de compras?. Así lo que se hace es
decir a la gente que no venga, por parte de quienes tienen
asegurada la nómina a finales de mes. Y todo lo que no sea
intentar vivir mejor con lo que producimos nosotros es estar
fuera de onda, claro que aquí hay quienes piensan más en
otras cosas.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
