Más. Eso fue lo que mereció la AD Ceuta ante el Pontevedra
en la ida de la primera eliminatoria de ascenso a Segunda
´A´ que disputaron caballas y gallegos sobre el tapete del
Alfonso Murube. Pero el fútbol es injusto y, al final, los
caballas se terminaron conformando con un empate que les
obligará a salir a ganar en Pasarón dentro de una semana. Si
el balompié entendiera de méritos, los blancos hubieran
ganado habida cuenta de la magnífica primera parte que
disputaron; pero, como nada es perfecto, en tiempo de
descuento un error de Lledó en el despeje se pagó tan caro
que propició el gol de Javi Rodríguez que a la postre
supondría el uno a uno definitivo.
Tras superar un arranque un tanto dubitativo, en el que
Víctor estuvo apunto de internarse entrelíneas, el conjunto
caballa se fue arriba explotando la banda izquierda. Por
allí Álvaro puso un balón a Pepe Martínez al que se le anuló
la acción por inexistente fuera de juego, cuando se marchaba
solo. A partir de ahí los blancos se sacudieron la presión,
para irse arriba.Poco después, el mismo guión. Fran Amado
metió un balón a la espalda de la defensa para que Pepe
Martínez, esta vez sí, pusiera el pase de la muerte que
salió fuera al tocar en David Fas. Dos acciones que
sirvieron para que los caballas se asentaran, haciéndose
dueños de la situación. Una coyuntura que aprovecharon los
caballas para, desplegando un juego alegre y vistoso,
adelantarse por mediación de Tato, quien cazó un balón en el
interior del área para bajarlo, y alojarlo de fuerte disparo
en las mallas.
Un serio revés para los granate que, por si fuera poco el
hecho de verse por debajo en el marcador, tuvieron que
prescindir del brasileño Igor por lesión. En su lugar entró
Javi Rodríguez, artífice del primer disparo a puerta de los
gallegos, al rematar de cabeza un balón colgado desde la
diestra.
Pero era el Ceuta quien controlaba el devenir del encuentro,
y David Fas volvería a probar fortuna al enganchar un balón
repelido por la zaga pontevedresa al botar una falta. Poco
antes de que De Lerma chutara directamente fuera desde la
frontal. Acciones a las que puso réplica Javi Rodríguez con
un remate que detuvo Lledó.
Los minutos pasaban y daba la sensación de que los blancos
mantenían a raya a los visitantes, que más que ir a por el
empate, se dedicaban a calentar la contienda. En esas, a
medida que se fue acercando el final del primer periodo el
choque se rompió, convirtiéndose en un correcalles que, a la
postre, benefició a los gallegos. Porque, ya en tiempo de
descuento, una internada de Dani por la izquierda significó
el empate de Javi Rodríguez, con la colaboración de un Lledó
que falló en el despeje. Un tanto psicológico, que decantaba
la balanza del lado pontevedrés, con lo que terminaría la
primera mitad.
El segundo periodo empezó sin ritmo, tardando en llegar las
ocasiones tanto en una portería como en otra. La primera de
Fran Amado que, desde el vértice del área, intentó
sorprender por alto al gigante Bonis. Pero mucho más clara
fue la oportunidad de los gallegos, que en una buena acción
de Dani -su mejor jugador sin duda- concluyó con un disparo
demasiado cruzado de Fran Rico.
Pero lejos de dejarse impresionar, los blancos se fueron
arriba, forzando hasta cinco saques de esquina consecutivos.
Uno de ellos rematado de cabeza por Alberto junto al palo,
otro también con la testa por Sandro que se marchó por
encima del larguero tras tocar en un rival y el último que
siguió el mismo camino al rematar Álvaro una pelota
rechazada. Aun así, las ocasiones caían de uno y otro lado,
como se pudo comprobar con el fuerte disparo lejano que se
sacó Víctor, obligando a lucirse a Lledó.
Con tablas en el electrónico, el ritmo de partido decayó
considerablemente al conformarse los granate con el
resultado y quedarse los caballas sin ideas; llegando las
ocasiones a cuentagotas. Por el lado ceutí Javi Navarro, que
entró para sustituir a Tato, disparó mal poco antes de que
Fran Amado rematara un balón colgado desde la diestra.
Siendo Fran Rico el que lo intentaba para los suyos.
A falta de diez para el final, Benigno Sánchez dio entrada a
Aitor en lugar de David Fas, cayendo Álvaro a la diestra y
Javi Navarro al costado zurdo. Una recta final en la que el
Pontevedra evidenciaba su peor estado de forma, a la par que
su pillería para perder tiempo, quejándose sus jugadores de
problemas musculares. Lo que llevó al portero Bonis a
tenerse que retirar, dando entrada a un Saizar que desvió a
córner un lanzamiento lejano de Enzo, que acababa de entrar
por De Lerma.
Pero ya no había tiempo para más. La eliminatoria se
decidirá en Pasarón, donde el Ceuta tendrá que remontar el
valor doble del gol marcado en el Murube por un Pontevedra
que nunca fue mejor.
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El Ceuta de Benigno siempre había ganado al ponerse por
delante
Hasta ayer, el Ceuta de Benigno
Sánchez había ganado siempre que se había puesto por delante
en el marcador. Un total de diez triunfos de los quince
partidos que lleva el murciano sentado en la banda, en los
que se da la circunstancia que los ceutíes siempre se
adelantaron. Un hecho que sucedió contra Baza, Puertollano,
Écija, Águilas, Mérida, Alcalá, Algeciras, Jaén, Talavera y
Lucena.
En cuanto a las tres derrotas, ni contra Linares, Granada ni
Lorca, los blancos marcaron, mientras que en los dos empates
ante Cartagena y Melilla, únicamente se hizo un gol contra
los melillenses, que sirvió para enjugar la desventaja del
tanto de Acorán.
A pesar de todo, y en un choque de estas características,
todavía restan por disputarse 90 minutos en tierras gallegas
donde los ceutíes tendrán la oportunidad de decantar la
eliminatoria a su favor y pasar a la siguiente ronda
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