Una vez más, con el mismo método y
con el mismo ‘modus operandi’ fue asaltada ayer otra
vivienda en el denominado ‘Pueblo de San Antonio’. Los cacos
lograron penetar en el hogar, a través de una ventana, y
hacer y deshacer en su interior mientras los inquilinos
dormían plácidamente en la noche del viernes al sábado.
Curiosamente, en la madrugada del jueves al viernes se
produjo otro suceso exactamente igual, calcado al de ayer.
Es curioso como [esto va siempre por ciclos] los hechos
delictivos se producen por oleadas hasta que la Policía da
con los cacos, los detienen y, para la cada vez más
masificada cárcel de Los Rosales [que cerró el viernes con
más de 290 reclusos -por encima de su capacidad-].
Ha sido noticia agradable, por cierto, el que los agentes de
las Fuerza de Seguridad detuvieron a un caco que asaltaba
viviendas después de dejar inconscientes a sus víctimas
mediante el estrangulamiento. Pero hay más métodos. Los que
ponen en práctica los ladrones que están protagonizando los
asaltos en San Antonio, por ejemplo. Entran en la vivienda
sigilosamente, arramplan sin hacer ruido con lo que se ve a
simple vista y, entre ellos, procuran llevarse las llaves
del coche ¿para qué?, para robarlo. Es el segundo que se ha
sustraído de este modo en sólo 48 horas y, en el mismo
lugar, o sea en el Pueblo de San Antonio. Lo que demuestra
que no le tienen excesivo respeto a las Fuerzas y Cuerpos de
Seguridad. Es el mismo sistema y, por tanto, puede deducirse
que pueden ser los mismos cacos.
Lo que todo esto demuestra es que, es evidente, debe fallar
algo en Ceuta. Una población tan de pequeñas dimensiones
como esta y con tan amplísimo número de policías no debería
tener tan repetidas situaciones como la descrita.
Queda claro que los delincuentes conocen por dónde no se
mueve la Policía con tanta asiduidad, lo que les plantea, a
los cacos, la posibilidad más fácil de retar a la policía.
De momento ya han dado dos ‘palos’ consecutivos. ¿Habrá un
tercero, o podrán dormir bien los vecinos de San Antonio?.
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