Representan uno de los elementos
más hermosos de todo el año en los distintos centros en los
que se vienen colocando esas auténticas obras de arte.
Es posible que, a lo largo de los años, no se esté dando la
publicidad que merecen estas exposiciones que, durante el
mes de mayo engalanan puntos típicos y lugares
tradicionales.
En los casi treinta años que llevo viviendo en Ceuta, por
diversos motivos, he visitado en muchas ocasiones varias de
las cruces de mayo y, realmente, puedo decir que si un día
perteneciera a un jurado para conceder los premios, no iba a
ser capaz de considerar mejor esta que aquella, con lo que
habría que aumentar los premios.
Veo la información de José Manuel Rincón, una información
cuidada y perfectamente documentada, donde se pone de
manifiesto que San Antonio y Bermudo Soriano han sido las
ganadoras de este año, y no me cabe ninguna duda de que lo
han logrado por méritos propios, pero cuando ves otras más y
otras, tienes que decir ¿Cómo habrán podido hilar tan fino
para poder valorar lo que han valorado? Hay que tener en
cuenta, y tengo delante de mí el reportaje de Rincón, que
pasas de una a otra y en todas hay tantos elementos
merecedores de premio, que también hay que super valorar a
quienes tuvieron el tino de dar como ganadores a quienes han
dado.
Casi nos queríamos adelantar, un poco más arriba, a algo que
ha sucedido y con muy buen criterio, puesto que Festejos ha
dado este año dos premios especiales a la Asociación
Síndrome de Down y al Centro Social del Mayor.
Sabemos que las deliberaciones, como siempre, han sido
largas, que había más calidad que nunca y que se hacía casi
imposible decantarse por una antes que por otra. Sin
embargo, los expertos, por algo lo son, decidieron y
decidieron bien, pero marcando muy bien el respeto hacia
otras que no recibieron premio, pero si la admiración de
todos.
¿Por qué el premio a San Antonio? Pues, por varias razones,
por su mejora año tras año, y en esta ocasión, además, al
haber montado una cruz a base de flores naturales, en donde
se conjugan los elementos, los colores y un gusto
inigualable.
En cuanto a la Barriada de Bermudo Soriano, hay que hablar
de palabras mayores, porque si ya es difícil lograr un año
el primer premio, repetirlo es casi imposible, y digo “casi”
porque ellos lo han logrado. ¿De qué manera? Particularmente
no conozco a nadie de los que intervienen en la confección
de la cruz, pero así se puede paladear mucho mejor, al ver
de qué manera son capaces de superarse, de qué manera se
entregan en algo que viven y de qué manera lo bueno del año
anterior lo han superado con creces:” una especie de cueva
en su local social y allí han levantado una extraordinaria
Cruz de Mayo, con adornos y flores naturales que le dejan a
uno perplejo.
Si alguien quiere ver, de verdad, una obra de arte, con
adornos, flores, luminosidad y buen gusto, no tiene más
remedio que visitar esta barriada, y su Cruz.
Y no podíamos dejar de lado el tercer premio logrado por la
Cofradía del Cristo de la Buena Muerte. Aquí digamos que es
casi obligado montar una cruz que quite el sueño y lo han
logrado.
En las Cruces de Mayo, Ceuta también tiene algo que decir.
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