Los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en Ceuta han
relacionado las últimas entradas de inmigrantes
subsaharianos por el mar con la estancia de estas personas
en los bosques de Marruecos situados junto a la frontera
ceutí, según han informado fuentes del instituto armado.
En lo que llevamos de mes han sido 14 inmigrantes
subsaharianos los que han intentado entrar en la ciudad a
nado, uno de los cuales tuvo que ser ingresado en la UCI del
hospital civil al presentar síntomas de ahogamiento.
Las investigaciones policiales han determinado que estos
inmigrantes estaban asentados en los bosques próximos de
Beliones y de Jbel Musa, dentro del reducido colectivo de
personas que permanece oculta en este lugar.
Los agentes han señalado que los inmigrantes intentan entrar
a nado debido a las dificultades para acceder por el doble
vallado fronterizo, tras haberse reforzado las medidas de
seguridad en la zona.
Los inmigrantes han estado ocultos en los bosques marroquíes
hasta intentar la entrada a nado o en pequeñas
embarcaciones.
Las Fuerzas de seguridad tienen la certeza de que aún
permanecen varias decenas de subsaharianos ocultos que
intentarán poco a poco entrar a la ciudad autónoma por mar.
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Laxa colaboración marroquí contra la inmigración
Una vez más, las Fuerzas de
Seguridad del Estado comprueban que, aunque sin recibir la
presión de antaño, la lucha marroquí contra la inmigración
es excesivamente suave en los últimos tiempos merced al
hecho de que en los montes de Beliones vuelven a asentarse
subsaharianos a la espera de penetrar por mar a Ceuta. Ya lo
han logrado catorce inmigrantes en los últimos quince días.
Aunque con logística reducida, los irregulares logran
disponer de neumáticas de las que se sirven para arriesgar
la vida a la hora de entrar en Ceuta.
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