Pero para trabajar de verdad, no
para vaguear, sino para ir a cumplir con una obligación cada
día y poder vivir dignamente, es una de las cosas más
complicadas que podemos ver hoy en nuestro país.
Y he dicho en nuestro país, porque no hay un solo pueblo, en
toda la geografía española, en el que el trauma de estar
buscando y no encontrar donde poderse ejercitar uno, está a
la orden del día.
Al vivir aquí en Ceuta, he observado desde hace tiempo y
sigo observando cada día, como personas entradas en años y
jovencitos o jovencitas, con el mismo tesón, pero con la
misma mala suerte, se vienen afanando, buscan por todos los
despachos y por donde sea preciso, para poder tener, a
diario, una obligación y un lugar al sol para mantenerse por
sí mismos, sin recurrir a otras cosas peores.
Y he hablado de despacho ¡¡Madre de Dios!!, lo que se cuece
en algunos de ellos, y la cantidad de “gamberradas” que se
programan para si aparece la persona adecuada para este
puesto que hay. He dicho LA, y aquí empiezan a ver algunos
la madre del borrego. Tú vas a tener el puesto de trabajo
pero ..., que Dios nos coja confesados.
Los tribunales están colapsados, eso dicen, pero ese colapso
se multiplicaría por tres, si salieran a la luz muchas de
las tramoyas que se cuecen, o se intentan cocer en algunos
despachos.
Porque hay que tener en cuenta una cosa, una empresa privada
tiene sus normas, el dueño marca las líneas a seguir, así o
así, pero cuando se administran puestos oficiales, aquí no
podemos estar sometidos al capricho del político de turno,
que ha llegado a ese lugar legal y legítimamente por unos
votos, pero luego se salta los votos y –muchas veces- la
dignidad de las personas, incluida la propia, para intentar
“pasarlo mejor”.
Si las paredes de ciertos despachos oficiales hablaran,
posiblemente algunos asuntos que dieron la vuelta al mundo,
desde la Casa Blanca, hace años, se quedarían como simple
juego de niños. Y todo, cuando una persona, o alguna más,
piensa, cree y actúa como si bajo sus zapatos tuvieran que
pasar antes, primero y luego, quienes el único delito que
han cometido es buscar un puesto de trabajo para vivir
dignamente.
A lo largo del año hay multitud de altibajos y mucha
variedad de trabajos, aunque sean, sólo, temporales. En esa
variedad de trabajos debe haber también variedad de quienes
los ocupen, para no tener que estar siendo “copados” como si
se tratara de un clientelismo hecho a la medida del señorito
de la política, para aquellos que le ríen las gracias, o
para aquellas que con tal de trabajar hacen lo que sea
preciso, porque por encima de todo está la comida diaria.
Desde hace más de un mes, hemos dicho que el principal
obstáculo con el que se iba a tener que enfrentar el
gobierno de Rodríguez Zapatero era el de la economía
decadente y precisamente cogido de la mano de ese problema
iba a estar el asunto del paro.
A nivel nacional, con o sin parches, irán tratando de
solventarlo mal o bien, a nivel autonómico, cada una de las
comunidades buscará sus medios para salvar la situación y a
nivel de Ceuta, el clientelismo, espero y deseo que no sea
la norma seguir, porque a la hora de votar, a todos nos
machacan pidiendo el voto, unos y otros, con lo que, por lo
mismo a la hora de buscar un trabajo que no haya un coto
cerrado del señorito de turno, aquí, en mi pueblo o en
Calzadilla de los Barros.
|