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El Partido Popular vuelve a confiar en el diputado por
Ceuta, Francisco Antonio González Pérez para ejercer la voz
cantante en el Parlamente en asuntos deportivos. Y lo es aún
con mayor rango, algo que peleó el Grupo Parlamentario del
PP a petición del político ceutí, puesto que la portavocía
que se le ha asignado cuenta con portavoz adjunto. Así es,
mientras que los aires de refresco tocaban a la puerta de
Génova y más de uno, probablemente en Ceuta, se frotaba las
manos soñando con la caída ‘a cuchillo politico’ del cinco
veces diputado a Cortes, el presidente del Partido Popular y
el Grupo Parlamentario vuelven a poner en las manos de Paco
Antonio [yo sí puedo llamarle así] la responsabilidad de la
voz que defenderá las tesis deportivas del PP en el Congreso
de los Diputados. No ha caído en vano el trabajo
desarrollado en los últimos cuatro años por el parlamentario
ceutí, y mucho menos, el peso de organizar la Comisión
Nacional de Deportes del PP desde la Presidencia que ostentó
y ostenta, y aportar un amplio documento destinado a ser el
eje vertebrador de la política del Deporte del Partido
Popular. Aunque moleste a mediocres de poco pelo, González
Pérez se ha labrado un camino de respeto y consideración no
sólo en el Congreso de los Diputados [esta es su quinta
legislatura], sino en el Grupo Parlamentario ahora en manos
de Soraya Sáenz de Santamaría, y en el propio Partido
Popular porque es uno de los hombres del presidente
nacional. Y fíjense que no pongo nombres ni apellidos. Por
una razón sencilla, clara y evidente, él es un hombre del
Partido Popular. Aquella formación refundada que acogió a
conservadores, liberales, centro reformistas y moderados.
Presidió Nuevas Generaciones en Ceuta, fue el líder regional
del PP ceutí y es el político que en nuestra ciudad más
veces se ha sometido al examen ciudadano. Cinco victorias en
las urnas le avalan. Ya tuvo responsabilidades en el Grupo
Parlamentario Popular en época de José María Aznar y las
continúa teniendo ahora con Mariano Rajoy. Díganle lo que
quieran, sobre todo los que le tienen esa antipatía absurda
y enfermiza, pero es evidente que Paco Antonio [yo sí le
puedo llamar así] cuenta con el respaldo de la cúpula
sencillamente porque su trabajo lo hace bien.
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OPINIÓN
