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Hablar del Instituto Ceutí de
Deportes es hablar del organismo responsable de toda la
gestión deportiva en nuestra Ciudad ya sea a través de la
utilización de algunas de sus instalaciones, recibiendo
cualquiera de las subvenciones establecidas o participando
en algunas de las muchas actividades organizadas por esta
institución.
El número de usuarios en las escuelas deportivas se ha visto
incrementado en más de un 30%, sin computar la natación
afectada por el cierre temporal de la piscina cubierta del
Díaz-Flor alcanzando una cifra superior a los 2.350
usuarios. Las actividades en horario escolar han atendido a
4.550 alumnos y la Promoción Deportiva a 1.150. Actividades
que también atienden las inquietudes de los adultos que han
asistido en un número superior a los 845 alumnos inscritos.
Las competiciones organizadas directamente por el ICD a
través de la Guía del Corredor han permitido la
participación de 4.941 atletas en las 14 pruebas que la
integran suponiendo un incremento de participación desde el
año 2001 superior al 200%. Actividades a las que debemos
unir los grandes eventos organizados como los Juegos del
Estrecho, el campeonato de España de Triatlón, el Gran
Premio de España de Tiro de Hélice y de Pichón, torneos de
Feria de water polo y de fútbol, regatas nacionales, el reto
del Estrecho de David Meca, etc.
Datos que evidencian la gran labor desarrollada por todos
los integrantes de esta institución desde sus diferentes
labores; personal de instalaciones responsables del
excelente estado de conservación de las mismas, personal de
los servicios deportivos encargados de la programación y
puesta en marcha de las actividades deportivas desarrolladas
en la Ciudad y del personal de administración en sus
diferentes funciones de atención al público, seguimiento en
la tramitación de las distintas subvenciones existentes,
etc.
En definitiva, cifras que demuestran el excelente trabajo
desarrollado por los profesionales encuadrados en el
Instituto Ceutí de Deportes alejadas de la demagogia
utilizada por quienes pretenden deteriorar la imagen de esta
institución con la única intención de dañar a su máximo
responsable, Juan Jesús Vivas obviando que, esta meditada
estrategia perjudica directamente a sus verdaderos
protagonistas, los trabajadores del ICD.
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OPINIÓN / AL SUR DEL SUR
