Con elevada indignación, los pasajeros del buque de Baleària
-que atracó alrededor de las 21’00 horas en el puerto de
Ceuta- se vieron obligados a desembarcar por la rampa
exclusiva destinada a los vehículos al no estar operativa la
plancha de pasajeros. Todo el viaje resultó una odisea. De
inicio, la salida prevista para las 19’30 horas desde el
puerto de Algeciras, se retrasó sin explicación alguna más
de 35 minutos, con la consiguiente contrariedad para los
usuarios de esta naviera que en el interior ya mostraron su
enfado. Pero lo peor estaba por llegar. Una vez amarrado el
barco a puerto, se complicó la tarea de apertura de la
puerta de pasajeros debido a un mal funcionamiento de la
pasarela que deben manejar los propios operarios de Baleária.
De tal modo, que sin muchas explicaciones más, según
comunican los pasajeros, tuvieron que bajar con los pesados
bultos por las esccaleras de acceso a la bodega y salir por
la rampa de vehículos. Una vez en tierra, los pasajeros
tuvieron que subir, de nuevo a la estación marítima por las
escaleras laterales con la consiguiente incomodidad al tener
que cargar con el equipaje, para pasar por el control
policial. Una odisea lamentable.
|