Un grupo de seis niños de entre seis y 12 años miden sus
fuerzas con dos adultos tres veces en semana en una
modalidad de guerra cuyo origen aún no se conoce. El
ajedrez, que tiene su primera referencia en la historia de
Occidente en las páginas del ´Libro de los Juegos’ escrito
por Alfonso X ‘El Sabio’ en el siglo XIII’, reúne lunes,
miércoles y viernes en turno de tarde a unas ocho personas
en el colegio de los Agustinos en torno a “un ejercicio
intelectual extraordinario que incentivar la actividad
neuronal”, expresó el presidente de la Federación de Ajedrez
de Ceuta, Manuel Fernández.
Se trata de un deporte en el que “cada jugada representa un
problema creado por el contrario”, que enseña a competir “de
forma sana” con un oponente que se sienta a pensar contigo y
en el que tienes que hacer un repaso mental de varias
jugadas de manera anticipada, “escogiendo el mejor paso a
dar”. Y es que este deporte es considerado como el mejor
ejemplo de actividad intelectual entre los juegos, si bien
existe aún muy poca evidencia entre capacidades cognitivas
concretas y la pericia en el ajedrez.
Aunque existe una débil correlación entre inteligencia y
pericia en el ajedrez entre los niños que están aprendiendo,
dicha correlación no existe cuando consideramos grandes
maestros o niños altamente talentosos para el ajedrez. El
factor que explica mejor el desempeño ajedrecístico es el
número de horas de práctica, aquellas en que se medita y
recuerda cada uno de los pasos a seguir con la fichas sobre
el tablero, asicomo la proyección mental de qué movimiento
del contrario prosigue al nuesto. Y es que el ajedrez es una
modalidad de lucha donde dos fuerzas antagónicas se
enfrentan en igualdad de condiciones, con las mismas armas,
sin ventajas, en una superficie de representación simbólica
donde el fin último es que la figura del rey no debe
desarapecer del encerado.
Los inicios de la actual federación ajedrecista en Ceuta se
encuentran en el año 1959. Antes de esta fecha, la
asociación que afiliaba a los jugadores de la ciudad era una
delegación de la Federación Hispanomarroquí, que tenía su
sede en Tetouan y cuyo delegado fue el veterano Julio
Renedo.
Con el final de protectorado, este ejercicio pasó a tener en
Ceuta su autonomía propia, con una recién estrenada
Federación de Ajedrez que tuvo en Eduardo Pastor a su primer
presidente, y “que fue sustituido por Fernando Sánchez
Barroso en el año 63”, apuntó Fernández, que llegó al sillón
de presidente un año más tarde, en 1964, momento en que este
deporte comienza a aproximarse hacia su momento de gloria en
la ciudad dado el alto grado de participación que
registraba.
Orígenes del ajedrez
Si bien se desconoce en qué momento de la Historia se
jugaron las primeras partidas, el primer vestigio palpable
que se tiene hasta la fecha de una forma de ajedrez data de
500 años antes de la era cristiana, momento en que se
descubrió en la India un juego que los nativos denominaron ‘Chaturanga’,
que más tarde sería acogido por los persas.
De difundir este juego por la costa del norte de África y
parte de la Península Ibérica se encargarían los árabes poco
más tarde. Fascinados por la simbología de este arte con el
campo de batalla, lo estudiaron en profundidad, percatándose
además de la férrea realación que lo ataba a las Matemáticas
Escribieron varios tratados y aparentemente fueron los
primeros en formalizarlo y escribir sus reglas. Así, entre
el 800 y el 900 antes de Cristo se comenzó a difundir por
Europa tras la apertura de las rutas comerciales de aquellos
días, se extendió a los demás países europeos.
Así llegaría hasta América, trasladado por los
conquistadores españoles, quienes probablemente también
encontraron su musa bélica en el famoso juego de la guerra.
Los bizantinos, entusiastas y practicantes de esta juego lo
difundieron por Rusia y en los Países Escandinavos. Sin
embargo, la modalidad de juego que potenciaron no echó
raíces en la Europa Occidental, donde prevalece la forma
italiana del juego, derivada de una fusión con las reglas
del ajedrez árabe.
Incondicionales sin local propio
Yival Shoithramani, Víctor nieto, Kumari Ramchand, los
hermanos Pablo y Fernando Serantes, Hrishikesmi son algunos
de los asiduos a las partidas de ajedrez que tiene lugar en
el colegio de los Agustinos entre las 17.30 y las 19.00
horas, organizadas bajo el amparo de la Federación de
Ajedrez de Ceuta.
Y es que “la asociación no cuenta todavía con local propio”,
afirmó Manuel Fernández, que agregó que esta escuela
municipal solicita un espacio a la Empresa Municipal de la
Vivienda de Ceuta “desde hace cuatro años, aunque”, según
matiza, “dicen que los tienen en cuenta”.
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