Según el informe elaborado por el Colegio Oficial de
Ingenieros Técnicos de Telecomunicación de la Comunidad
Valenciana (COITTCV) Ceuta y Melilla conforman la autonomía
más ruidosa por delante de Baleares. España además es el
segundo país más ruidoso del mundo tras Japón. La Asociación
Contra el Ruido en Ceuta (ASCORCE) pretende que se cree un
mapa de ruidos con las zonas más afectadas de la ciudad.
El estudio se ha realizado a través de consultas a técnicos
medioambientales y médicos y mediante encuestas a
poblaciones de más de 250.000 habitantes extrapolables al
resto de ciudades españolas. Según fuentes de ASCORCE “ese
no es el único estudio, según el Instituto Nacional de
Estadística hay un 48% de quejas ciudadanas en Ceuta, un 13%
más que la segunda, la Comunidad Valenciana”.
El principal factor de ruido de Ceuta es su densidad de
población. La legislación marca que las poblaciones de más
de 100.000 habitantes deben realizar un mapa de ruidos para
conocer las zonas más afectadas, “aquí llegamos a los 80.000
habitantes pero con la acumulación de núcleos urbanos al ser
un territorio tan restringido surge la necesidad de que
hagamos aquí los mapas de ruido” explica la misma fuente de
ASCORCE. Además existen dos ejes viarios transitados por más
de 6.000.000 de vehículos al año lo que requeriría también,
según la Ley de Ruidos de 2005, un mapa de decibelios para
comprobar la distorsión sonora.
Desde ASCORCE sólo piden “que se aplique la legislación.
Ceuta posee una ordenanza de ruidos modélica. Con el
desarrollo de la última ley en 2007 planteada por el
Gobierno es cuando se han puesto a la altura de la de aquí,
el problema es fundamentalmente que no se usa”.
La asociación presentará alegaciones contra el Plan General
de Ordenación Urbana (PGOU) porque no se contempla en el
proyecto las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS). “Hace ya
año y medio que el consejero Ferrón se comprometió a
acometer los problemas que Ceuta tiene con el ruido, le
apoyó toda la oposición, pero hasta ahora no han hecho
absolutamente nada” comentó, indignada, la fuente de ASCORCE.
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