Mis cosas
 

ADE
ade@elpueblodeceuta.com
 

El uno el “breakdance”, con el dos “el crusaito”, con el tres “El Michel Jackson”, con el cuatro “El robocot”. Perrea, perrea. Una vez más, para no dejarme en mal lugar, se me viene a demostrar, que esto es un país de pandereta. Aquí sale cualquiera, saca una canción que ni es canción ni nada que se le parezca, le hacemos propaganda en un programa televisivo y todo quisqui a cantar la canción de marras.

Pero es que no somos nosotros solos los considerados un país de panderetas, es que otros muchos países cantan y bailan esta canción que, sin discusión alguna, en todas las ferias de este verano será la canción que más se cante y se baile. Y aunque alguno no se lo crean va, a Eurovisión, con ciertas garantías de éxito.

Lo extraño es que, todos esos países donde se nos considera un país de panderetas, con toda seguridad serán los que más votos nos den. Tiempo al tiempo.

No tenemos duda alguna de que también nos podemos equivocar y hagamos, una vez más, el ridículo en Eurovisión, lo que no sería nada nuevo. Pero mire usted, amigo mío, no sé por qué razón y sabiendo como camina el mundo, en estos momentos, donde baila al son que le marcan cuatro mindundis, nada me extrañaría que fuese un éxito la participación española con esa canción en el concurso europeo.

Para saber que, todos nosotros bailamos al son que nos cantan quienes no tienen ni idea de cantar, basta con comprobar que es, en verdad, lo que se hace con nuestros votos. Usted le vota a determinado partido por estar de acuerdo con su programa o porque se acerca más que ningún otro a sus ideas políticas.

Todo eso me parece de absoluta normalidad. Pero si ese partido al que usted ha votado, no tiene número suficiente de diputados para gobernar busca alianza con otro u otros partidos para gobernar cuando, precisamente, usted jamás votaría a esos partidos con el que el suyo se ha aliado. O sea, con claridad meridiana, que usted tiene que bailar al son que le toquen. Y cuidadito con dar un paso en falso que se salga del baile marcado. Y no hay más cera que la que arde.

Los funcionarios de justicia se han pegado una tira de tiempo de huelga, reclamando una subida con la que todos los funcionarios tengan el mismo sueldo puestos que, todos ellos, en sus categorías hacen el mismo trabajo. Por fin se ha puesto final a la huelga, alcanzando un acuerdo con esa subida salarial. El porcentaje de la subida no creemos que sea muy alto, sino algo dentro de la normalidad. Pues verán, ahora, cuando se formen las cortes, como lo primero que hacen sus señorías es subirse los sueldos y en un buen porcentaje.

Totalmente de cuerdo en esa subida que se pondrán. Es más, deberían ganar mucho más por todos los esfuerzos que hacen, cada día, para que no nos falte de nada y tengamos un alto nivel de vida. O sea que como decía la sabia de mí abuela, vivamos mejor que en brazos. Pues ya verán, como habrá quienes critiquen esas subidas de los sueldos de sus señorías. ¡País!