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Más de dos meses y terminó la
huelga. Se decidió volver al trabajo tras haberse firmado el
acuerdo con el Ministerio. La subida, según se mire, puede
ser lo que se esperaba, pero las pérdidas de todo ese tiempo
tardarán en ser compensadas con esos 190 € de subida
salarial que se acordó.
Con todo, ahora viene lo difícil, porque en este tiempo que
no se ha trabajado los documentos no se han puesto al día,
por sí solos, y tras nueve semanas de paro, la cantidad de
papeles que se han acumulado es tal que pasarán muchas
semanas, más de esas nueve, pasarán varios meses, se ha
establecido un tiempo, tres meses, pero, desde el primer
momento, nada más empezar el trabajo se han dado cuenta
quienes tienen que ponerlo al día, que ese tiempo no es
suficiente.
Y como la huelga está reconocida en nuestro sistema, pero
sus consecuencias también, ahora comenzarán, ya están
comenzando, los descuentos por los días no trabajados. Un
problema añadido.
Los funcionarios de Justicia de Ceuta comenzaron a trabajar,
de nuevo, el martes. Para muchos ha sido una experiencia
insólita, nunca pensó el personal que la situación se iba a
prolongar tanto tiempo, pero aquí ya se sabe, se comienza el
movimiento y luego ya veremos cuando termina todo.
Desde los juzgados se ha comentado que la vuelta al trabajo
ha significado algo que no se esperaba, porque jamás
pensaron que se podrían acumular tantos papeles, que ahora
tendrán que ir poniendo al día, al tiempo que vayan
atendiendo todas las cosas del día a día. Serán meses
complicados, pues, pero es el precio de la libertad a
ejercer un derecho.
De lo que ha trascendido desde dentro de los juzgados,
parece que el Registro Civil, el Juzgado de Instrucción
número 4 y el Juzgado de Instrucción número 2, son los
departamentos en los que más mella había hecho el paro de
nueve semanas.
Y el hecho de que ahora el trabajo se duplique, o incluso
más, hace que los funcionarios no se queden parados y se
muestren atentos para ver cómo se van a desarrollar todos
los planes de actuación para ir recuperando el trabajo
acumulado, que para algunos, si se van a descontar esos
días, ese trabajo o no hay que hacerlo o si se hace sería
como algo extra.
Aquí, cada uno intenta ver la realidad desde su punto de
vista, analizando lo que hay, volviendo sobre sus pasos y
siempre buscando el que no sea la misma parte la que pague.
Y los sindicatos no salen de un acuerdo y ya ven el contra
acuerdo, porque el que esa labor no hecha se tenga que
realizar en tres meses prorrogables, en según qué casos,
hace que el representante sindical de CCOO haya afirmado que
“ese tiempo es insuficiente ... y que todos los juzgados
tendrán que añadirle varios meses más”.
Cuando se pacta una cosa hay que ver hasta donde se llega o
hasta donde se puede llegar, y lo que se pactó el pasado
domingo con el Ministerio indica que la participación en el
plan tiene carácter voluntario, eso sí, no se podrán superar
las 40 horas de trabajo estipuladas.
Lo que decíamos, una cosa es el papel y otra la realidad que
encubre ese papel, por cuanto las retribuciones por esta,
aún no se han fijado. Una vez más nos volvemos a encontrar
con el galimatías de “ te quito por aquí, para entregarte
por la otra parte”. No lo entenderé nunca.
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OPINIÓN / EL ESQUINAZO
