Nueve semanas después de iniciar la huelga indefinida, los
funcionarios de Justicia regresaron ayer a sus puestos de
trabajo después del acuerdo firmado el pasado domingo con el
Ministerio que contempla la subida salarial de 190 euros.
Sin embargo, la vuelta a la rutina no ha sido fácil y los
trabajadores se han encontrado con montañas de papeles sobre
sus mesas que deberár ir resolviendo con el paso de los
días. Además, deberán atender el trabajo diario, por lo que
consideran insuficiente el plazo de tres meses puesto por el
Ministerio. Por otro lado, ya se han empezado a descontar de
las nóminas los días no trabajados.
Los funcionarios de Justicia se incorporaron ayer a sus
trabajos después de una huelga indefinida que ha durado más
de dos meses. Así, el sistema judicial ceutí irá recuperando
la normalidad poco a poco aunque el primer día el retraso
causado se dejó notar. Así, las oficinas de la
Administración volvían a verse bulliciosas, con trabajadores
en sus respectivas mesas sobre las que se acumulaban
montañas de papeles.
De la misma forma, el Registro Civil recibió ayer una
avalancha de personas que solicitaban diversos documentos o
la realización de algún trámite que hasta ahora había
quedado paralizado. El Juzgado de Instrucción número 4 es
uno de los que más archivos acumulaban ayer por la mañana.
Uno de sus trabajadores comentó que “hoy estamos
desbordados, porque no es sólo empezar todo esto, sino
compaginarlo con lo que entra cada día y atender las
llamadas telefónicas”.
Otra de las dependencias donde ayer no se daba abasto era en
el Juzgado de Instrucción número 2, donde la plantilla al
completo regresaba a la actividad con los armarios llenos de
documentación por tramitar. En este juzgado es donde trabaja
el representante de Justicia de CCOO, Damián Martín, quien
afirmó que “regresar al trabajo ha sido duro porque después
de dos meses nos hemos encontrado muchas cosas acumuladas”.
Sin embargo, Martín también señaló que “ya era necesario
volver porque las familias comenzaban a resentirse”.
Ahora, los funcionarios se mantienen atentos a cómo se
desarrollarán los planes de actuación para recuperar el
trabajo acumulado. En un principio, el acuerdo contempla que
esta labor se realizará en tres meses, prorrogables para los
casos en los que el tribunal en cuestión haya acumulado más
procedimientos de lo cotidiano. Sin embargo, el
representante sindical de CCOO afirma que “este tiempo es
insuficiente en cualquier caso, y todos los juzgados tendrán
que añadirle varios meses más”. Según lo pactado en el
Ministerio el pasado domingo, la participación en el plan
tiene carácter voluntario, aunque no se podrá exceder de las
cuarenta horas de trabajo estipuladas. En cuanto a las
retribuciones por esta labor, aún no se han fijado
cantidades pero estas serán directamente proporcionales a la
brevedad en tramitar los asuntos pendientes.
Por último, en cuanto a los días de huelga que se
descontarán en nómina, Martín explica que “ya nos han
quitado cuatro días de la nómina de marzo que cobramos
ahora, y desde la Administración de Justicia han anunciado
que en la próxima nos descontarán ocho”. Así, durante los
meses sucesivos hasta alcanzar el montante de los sueldos de
estos dos últimos meses, por lo que los descuentos en las
nóminas podrían durar también alrededor de un año.
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Pacto para alcanzar los 400 euros con la nueva Oficina
Judicial
Una de las claves en la
negociación de este acuerdo ha sido la aceptación por parte
de los sindicatos de la firma del acuerdo para la
implantación de la nueva Oficina Judicial, una de las
condiciones básicas puestas sobre la mesa por el Ministerio.
Para ello, se contempla que los funcionarios deben
participar de forma activa realizando cursos de
especialización y formación.
Aunque la gran novedad es que a la entrada en vigor de esta
oficina, y para los funcionarios afectados por su
implantación, “se garantiza que la realción de puestos de
trabajo no contenga ningún puesto genérico cuyo complemento
específico sea inferior de 400 euros mensuales”. Esta
cuantía se materializará en 2009, aunque en el caso de que
no esté implantada a final del año “por causa no imputada a
los trabajadores” la subida salarial se realizará a fecha 31
de diciembre de ese año.
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