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El fútbol local volvió ayer a ser noticia desagradable por
la agresión sufrida por el árbitro asistente Roberto Carlos
Nieto Acosta al concluir el partido de Regional Hilal
Deportivo-A.S.I.G.C. El colegiado de 17 años, que recibió un
puñetazo en la cara del portero del Hilal que le produjo un
corte en el labio inferior y problemas en la mandíbula y en
los dientes, denunció a su agresor en la Comisaría de
Policía, después de ser atendido en el servicio de Urgencias
del Hospital Civil.
Los incidentes, según informó a esta redacción el Comité
Técnico de Árbitros, se produjeron a la finalización del
encuentro, cuando el guardameta del Hilal Deportivo le
propinó a Roberto Carlos un fuerte golpe en la cara. El
asistente perdió el conocimiento, según relató a este medio
el propio árbitro, y fue llevado al vestuario con una herida
en el labio. De inmediato hicieron acto en el campo
federativo ‘José Benoliel’ miembros de la Policía Nacional y
de la Policía Local, siendo evacuado en ambulancia el
árbitro hasta el hospital donde fue atendido y curado de las
heridas. No obstante, el colegiado debe visitar hoy al
odontólogo porque según detalló la madre del asistente
“tiene los dientes desplazados y necesita que lo vea un
dentista”.
Antonio Soto explicó que el árbitro perdió el conocimiento
durante una media hora y que fue atendido en el propio
terreno de juego por una ATS, siendo posteriormente
trasladado en una ambulancia del 061 al Hospital Civil; del
centro hospitalario y acompañado por su madre, Soto y otros
miembros del Comité Técnico de Árbitros se dirigió a la
Comisaría en el paseo de Colón para presentar una denuncia
acompañada del parte médico.
El partido entre el Hilal y la Asociación Independiente de
Guardias Civiles correspondía a la sexta jornada de la
Regional y concluyó con triunfo del A.S.I.G.C. por 3-2.
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“Estamos indignados porque es la enésima agresión que
sufrimos”
El presidente del Comité Técnico
de Árbitros, Antonio Soto, manifestó a EFE que siente “una
gran indignación e impotencia porque es la enésima agresión
y advertimos que cualquier equipo de la Regional que tenga
en sus filas a un agresor no jugará más; habrá que adoptar
la medida que sea para evitar que vuelva a pisar un campo”.
Soto añadió que “esto no puede repetirse más, estamos
cansados de sufrir agresiones salvajes de gente que no debe
jugar al fútbol”.
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