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Los dos cementerios de la Ciudad Autónoma, el civil de Santa
Catalina situado en San Amaro y el de Sidi Embarek sito en
Los Rosales, tienen una situación de precariedad laboral muy
alta, hasta el punto de que en el musulmán tan sólo uno de
los trabajadores es fijo.
Los sindicatos, especialmente la Federación de Servicios
Públicos de la Unión General de Trabajadores de Ceuta, ha
solicitado al Gobierno de la Ciudad Autónoma que ponga fin a
la precariedad en el empleo en los dos cementerios, de forma
que se consoliden sus plazas de trabajo a través de la
oferta de empleo.
La situación en el Cementerio de Sidi Embarek es peor que en
el de Santa Catalina en lo que a la precariedad laboral de
sus trabajadores se refiere, ya que sólo uno de los
empleados es funcionario. Se trata además del encargado, que
recibe la denominación laboral de “guarda enterrador”,
enmarcado dentro de la última categoría funcionarial: la E.
En el Cementerio de Santa Catalina las cosas están un poco
mejor, ya que, aunque la precariedad es alta, no llega a la
temporalidad casi completa del camposanto de Sidi Embarek.
Mientras la plaza de encargado del cementerio musulmán está
en el Grupo E, en el civil de Santa Catalina la Ciudad ha
aprobado que el gerente pase del Grupo D al C, por lo que
desde la Unión General de Trabajadores se va a pedir que, si
no se puede saltar un grupo laboral, sí que se suba al
encargado del camposanto de Sidi Embarek al Grupo D para
dignificar su trabajo.
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