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Los once miembros del jurado popular que debían valorar si
Ali Ali Ahmed mató a su vecino Munir Mohamed Tahar llegaron
a un acuerdo en el veredicto la noche del viernes. La
decisión se tomó por unanimidad, lo que llevó a una
sentencia clara: ni Ali ni su hermano Mohamed tuvieron nada
que ver en el homicidio del joven. Así, ambos eran absueltos
y, en el caso de Alí, esta decisión suponía recuperar la
libertad perdida desde hace tres años, tiempo en que ha
estado en prisión por estos hechos.
La decisión del jurado se fundamenta principalmente en la
falta de pruebas que sitúen a Ali en la escena del crimen el
día 31 de marzo de 2005 en torno a las 21.00 horas. Estas
circunstancias ya llevaron a que la acusación particular
presentada por la familia del fallecido retirara los cargos
contra Mohamed, tras evidenciar una falta de certezas que
llevaran al acusado a la calle San Daniel aquella noche. En
cuanto a su hermano Alí, el único punto que sostenía su
permanencia en el banquillo era el hecho de que un testigo
presencial afirmaba haber visto como este disparaba a Munir
Tahar tras discutir con él.
Pero este testimonio no ha sido suficiente para el jurado,
el cual también puso de manifiesto en la sentencia las
contradicciones en las cuatro declaraciones realizadas por
los testigos protegidos a lo largo de estos tres años.
Además, los miembros del jurado no tomaron en cuenta lo
declarado por la tía del fallecido en la vista oral, ya que
sus acusaciones sobre la autoría de Ali y Mohamed Ali Ahmed
se basan en los rumores que comenzaron a correr por la
barriada del Príncipe tras los hechos. Por todos estos
motivos, Ali fue puesto en libertad y la noche del viernes
pudo dormir en su casa por primera vez desde que sucedieran
los hechos.
El suceso se remonta al 31 de marzo de 2005, cuando el joven
Munir Mohamed Tahar moría a consecuencia de siete disparos
en un callejón junto a la calle San Daniel, en la barriada
del Príncipe. Desde un comienzo, los hermanos fueron los
principales sospechosos, ya que en el barrio se rumoreaba
que habían tenido varias disputas, algo que tampoco se ha
podido demostrar.
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