Las barriadas de la Encrucijada y Miramar Bajo cumplirán un
sueño, el de tener sus propias pistas deportivas
descubiertas para disfrute de su asociación vecinal. La
actuación se acometerá en menos de dos meses y las canchas
vendrán pefabricadas desde Madrid, por lo que su instalación
será rápida. En la Encrucijada sólo falta que se instale la
pista, algo que podría suceder en menos de un mes; en
Miramar queda algo más de un mes, ya que está en
contratación. Son pistas antivandálicos.
|