El Juzgado de Instrucción número 13 de Málaga ha admitido a
trámite y ha abierto diligencias previas para esclarecer si
el Hospital Doctor Pascual de Málaga pudo incurrir en algún
tipo de negligencia o mala praxis médica en la intervención
de cirugía estética que realizó el pasado 7 de noviembre a
una ceutí de 44 años que, tras semanas de sucesivas
complicaciones y reiteradas operaciones de urgencia acabó
falleciendo el pasado lunes en el Hospital Carlos Haya de la
capital andaluza.
“Ilusionada”, según recordaban ayer con un nudo en la
garganta sus familiares, M. E. S., de 44 años, ingresó el
pasado 7 de noviembre en la Clínica Doctor Pascual [una
cadena de establecimientos sanitarios que recientemente
mostró su interés por recibir pacientes ceutíes tras
establecerse en el Campo de Gibraltar] de Málaga, a la que
recomendó acudir una amiga, para someterse a una liposucción
y una cirugía mamaria, intervención para la que había
solicitado un crédito de 8.500 euros. Teóricamente debía
haber salido del centro tres días después, pero tras
someterse a la operación se sintió mal y volvió a entrar en
el quirófano para subsanar, vía reducción de intestino, el
“picotazo” que se le había causado en él durante la primera
cirugía.
Su situación empeoró durante las dos semanas siguientes con
la aparición de adherencias, pus e infecciones por todo el
cuerpo. Quince días después de ingresar volvió a ser
sometida a una operación que dejó su intestino delgado en
menos de un metro. Paralelamente apareció una fístula y
empezó a padecer insuficiencia renal, para la que se
descartó diálisis en el centro, y otras complicaciones.
Además, se le redujo el estómago. “El trato fue exquisito en
todo momento, por eso no nos planteamos sacarla de allí,
donde nos decían que se le podía dar tan buena atención como
en el Carlos Haya”, lamentan sus familiares, que finalmente
optaron por llevarla al prestigioso clínico público
malagueño el pasado día 20.
“Ingresó y mejoró, por lo que la pasaron a planta, pero el
pasado domingo volvió a empeorar hasta fallecer”, detallan
sus allegados, que inmediatamente pusieron el caso en
conocimiento del Juzgado de Instrucción número 13 de Málaga,
que acordó admitir a trámite su denuncia y abrir diligencias
al respecto para esclarecer si durante el tiempo que pasó en
la clínica privada la fallecida pudo sufrir una negligencia
o una mala praxis médica.
Además de tomar esta iniciativa dos forenses realizaron una
autopsia judicial del cadáver cuyos resultados aún no se
conocen, tal como recomiendan hacer siempre en estos casos a
las personas cercanas a los fallecidos las asociaciones
especializadas en este tipo de casos. “No sabemos, ni
afirmamos, que la actuación de los médicos fuera irregular,
pero al menos queremos cerciorarnos de si fue así o no”,
indicó ayer la familia.
|
AVINESA: “Nunca se debe firmar antes de operarse que la
intervención puede acabar en muerte”
La presidenta de la Asociación de
Víctimas de Negligencias Sanitarias (AVINESA), María Antonia
Moral, recordó ayer en declaraciones a este periódico que
algunas intervenciones quirúrgicas “están cubiertas por la
Seguridad Social” y recomendó acudir “siempre que se pueda”
al sistema público de salud para una operación como la de
reducción de estómago, aunque este no fue el caso de la
ceutí. “Están creciendo las intervenciones que se realizan
en clínicas privadas”, admitió Moral, “pero tanto antes de
acudir a ellas como después, en caso de que haya algún
problema, lo mejor es pedir asesoramiento a asociaciones y,
sobre todo, no firmar nunca antes de someterse a la
operación que esta puede terminar con resultado de muerte,
pues en ese caso debe realizarse en un hospital”, advirtió.
En caso fatal, y aunque no llegue al fallecimiento, la
especialista recomendó “denunciar” el caso poniéndose en
manos de abogados expertos en Derecho Sanitario y exigir
“inmediatamente” una autopsia judicial del cuerpo que sirva
para acreditar más tarde si la muerte del paciente se
produjo o no por una negligencia sanitaria. “Es complicado
que se reconozca un fallo así en los tribunales, pero cada
vez existen más médicos peritos y otros agentes dispuestos a
colaborar”, apuntó Moral.
|