Marina Hércules, empresa concesionaria del puerto deportivo
de Ceuta, ya tiene su reglamento de explotación propio,
según informó el director de la empresa que gestiona la
instalación marítima, Emilio Barranco. Con ella se supera la
normativa anterior con la que se legislaba la actividad y
configurada por el Club Náutico, que cedió el testigo a
Mahersa en mayo del 2006. Desde ese momento, “se hacía
necesaria una normativa autónoma, donde se disponga el uso
correcto de las instalaciones del puerto”, aseveró Barranco.
El nuevo reglamento contempla la prohibición de fumar
durante las operaciones de avituallamiento de combustible y
encender fuegos, barbacoas u hogueras. No se permite
mariscar o pescar en el interior del puerto bañarse o nadar,
así como lanzar escombros, basuras, líquidos residuales,
contaminantes o no, tanto a tierra como al agua, fuera de
los depósitos de residuos.
Se prohibe llevar a bordo materiales inflamables, explosivos
o peligrosos, salvo los cohetes y bengalas de señales
reglamentarias. Éstas y otras normas, concebidas para el
buen uso de las instalaciones, se recogen en un documento de
24 páginas que Mahersa aportará a los clientes que lo
soliciten. Son de obligatorio cumplimiento y con ellas se
pretende mejorar las relaciones entre los distintos usuarios
del puerto deportivo, cuyos 423 amarres se encuentran
ocupados, de los cuales un diez por ciento son foráneos.
Según Barranco, el mantenimiento de la limpieza y las buenas
prácticas en esta cara de Ceuta contribuye a que los
turistas que lleguen a la ciudad en yate se queden con buen
sabor de boca.
|