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Reflexionar sobre todo lo que
rodea a la puerta de entrada a nuestra Ciudad resulta al
menos, inquietante. No en lo relativo a la Estación Marítima
como tal que presenta un especto muy mejorado en cuanto a
sus instalaciones, lo realmente preocupante para el futuro
de nuestra Ciudad son los servicios prestados por las
navieras que realizan el trayecto entre Ceuta y Algeciras.
Es pertinente afirmar que, dicho servicio resulta vital para
el desarrollo de una Ciudad necesitada de la solidaridad de
todos los estamentos y cuya puerta de entrada natural es el
Puerto de Ceuta por tanto, de ello depende
trascendentalmente nuestra paupérrima economía. A través del
transporte marítimo llegan todos los productos básicos
consumidos por los ceutíes, los productos para nuestro
tejido comercial, los medicamentos, materiales de
construcción, etc.
A esto, debemos sumar que nuestros visitantes lo hacen
mayoritariamente por esta vía repercutiendo directamente su
afluencia en la economía ceutí a través del turismo. Es
totalmente inviable el mantenimiento de nuestro sector
turístico con la existencia de tarifas abusivas por parte de
las navieras y con sus decisiones unilaterales.
Los ceutíes, clase política, sindical, empresarial y
ciudadanía en general debemos unirnos y exigir a estas
tarifas en consonancia con los gastos de explotación
teniendo en cuenta la distancia entre los puertos de Ceuta y
Algeciras. La proliferación en los últimos años de las
diferentes ofertas especiales ofrecidas resultado de la
libre competencia indican la posibilidad de la existencia de
tarifas mucho más asequibles.
En definitiva, el futuro de nuestra Ciudad, de ceutíes y por
supuesto, de la propia subsistencia de estas navieras
dependen directamente de la reducción de las tarifas en el
trayecto Ceuta-Algeciras. No es posible que esta línea
rentabilice las cuentas de resultados de las navieras a
consta de los bolsillos de los ceutíes.
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OPINIÓN / AL SUR DEL SUR
