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Una delegación de la Unión de Comunidades Islámicas de Ceuta
(UCIDCE) que preside Laarbi Maateis trasladará este fin de
semana en Zaragoza al Consejo de la UCIDE, la mayor
federación de entidades musulmanas de España, una petición
formal para instarle a que se ponga de acuerdo con la FEERI
y la Junta Islámica con el fin de promover la creación del
primer banco español acorde con los preceptos de la Ley
Islámica, la ‘Sharia’, que prohíbe a los musulmanes dar o
recibir intereses y que sus ahorros se inviertan en
determinados sectores como el del juego o el alcohol.
El Islam alienta a sus fieles a invertir su dinero, pero
asociándose y compartiendo riesgos y beneficios, no
convirtiéndose en meros acreedores; tampoco permite dar o
recibir intereses (para los musulmanes el dinero es un medio
de intercambio, por lo que está proscrito que genere más por
el mero hecho de prestárselo a otro) y prohíbe las
transacciones especulativas o que sirven para respaldar
prácticas o productos desaconsejados por el Corán como la
construcción de casinos o la fabricación de bebidas
alcohólicas, por ejemplo.
Según reconoció en declaraciones a este periódico el
presidente de la UCIDE y la Comisión Islámica de España,
Riay Tatary, el de la constitución del primer banco islámico
español es un tema “complejo” sobre el que se han encargado
diferentes informes con la idea de convocar un Consejo
“monográfico” para abordar la cuestión de aquí a unos meses.
Maateis, que no ha acudido por motivos laborales a Zaragoza
[donde se celebra el VI Encuentro de la UCIDE en el Noroeste
de España bajo el título ‘La actualidad de los musulmanes en
Occidente’], explicó ayer que los miembros de la UCIDCE que
sí han viajado a la capital maña plantearán a la UCIDE su
deseo de que las principales federaciones musulmanas de
España se unan en este empeño y ofrecerán Ceuta para que se
instale aquí la primera oficina de esta futura entidad.
“Tenemos ojeado algún local que podría servir, aunque nos
parecería igual de bien que se instalase aquí, en Madrid, en
Barcelona o cualquier otra ciudad”, explicó Maateis, quien
reiteró que la UCIDCE ya ha constatado el interés de
diferentes empresarios y comerciantes locales por trabajar
con una entidad bancaria acorde con los principios de la
religión islámica.
La UCIDCE considera que hay dos vías factibles para alcanzar
su objetivo: la constitución de un nuevo banco regido por
los principios islámicos o el lanzamiento, por parte de
alguna entidad existente, de una línea de productos
específica para la comunidad islámica. Hasta ahora sólo
Bancorreos, con una cuenta corriente exenta de intereses, y
La Caixa, líder en número de clientes inmigrantes, cuyos
cajeros incluyen ya el árabe entre los idiomas a escoger
para realizar cualquier gestión, han hecho alguna incursión
en esta área de negocio.
Hasta la fecha ha sido la Junta Islámica, que abandonó la
Comisión Islámica en enero de 2006, la federación que con
más insistencia se ha preocupado por intentar “fomentar
productos bancarios y financieros de contenido halal y ético
que tiendan a la humanización de la economía y a la
redistribución de la riqueza”.
Posibilidades para todos
Si no hay contratiempos imprevistos los musulmanes ceutíes
creen que “en 2009” podría echar a andar una entidad
bancaria acorde con los preceptos islámicos que contribuiría
a “resolver muchos problemas de los fieles que desean
cumplir escrupulosamente con los preceptos del Islam”.
“Nosotros respetamos tanto a quien quiere seguirlos al pie
de la letra como al que no, pero ambos deben tener el
derecho de gestionar sus ahorros y sus inversiones como
mejor les parezca”, opina el presidente de la UCIDCE, que
agrupa a más del 90% de las comunidades de la ciudad.
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